viernes, 30 de marzo de 2012

GRANDES PRINCESAS DE LA HISTORIA: Las Beguinas

''Al noble amor me he dado por completo, pierda o gane todo es suyo en cualquier caso. ¿Qué me ha sucedido que ya no estoy en mí? Sorbió la sustancia de mi mente. Mas su naturaleza me asegura, que las penas del amor son un tesoro". Así de claro lo tenía Hadewych de Amberes (hacia el año 1240), autora de varias obras en poesía y en prosa como ésta, 'Amar el Amor'. Ella, como muchas otras intelectuales de la Edad Media, formaban parte de una Asociación de mujeres llamadas beguinas, que dedicaban su vida a ayudar a los desamparados, a la vez que desarrollaban una brillante labor intelectual. Eran cristianas adelantadas a su época, que se preocupaban de su propio desarrollo cultural y social, y desde ahí trabajaban con desfavorecidos.

Para hablar de ellas hay que situarse entre los siglos XII y XIII, una época convulsa de caos y cambio, cuando en Europa convivían varias culturas y religiones influenciándose entre sí. Los reyes y el Papa estaban siempre a la gresca unos con otros. Era la época del romanico y emergia el gótico. Y en ésta época surgieron ellas, las beguinas, unas mujeres realmente fascinantes y dignas de recordar.

Eran cultas, con posibles, solteras, casadas o viudas que se iban a vivir temporal o definitivamente a los beguinarios donde estudiaban, rezaban, trabajaban con las manos, y atendían a los necesitados. También se dedicaban a la sanación y curación a través de las plantas. 

En ellas no mandaba nadie, o sea ni Iglesia ni hombres. Eran libres. No tenían votos, ni era una orden religiosa. Cada beguinario se bastaba a sí mismo y tenía sus propias normas.

Al principio eran muy bien vistas social y religiosamente. Fueron grandes místicas, literatas, y médicos que escribieron tratados importantes. Los de medicina hasta ahora eran atribuidos solo a hombres, porque en siglos sucesivos se consideró que una mujer no tenía capacidad para escribir en Medicina algo tan bueno como un libro que fue de texto en Universidades hasta el S. XVI.

Finalmente la 'evolución' de la sociedad y la Iglesia no podía tolerar esa situación por más tiempo. Las acusaron de brujas y consiguieron apresar a varias. La Inquisición llevo a la hoguera a alguna de ellas, como Margarita Perote. Les ordenaron disolverse pero fue muy difícil porque estaban en todo Europa incluidas Castilla y Cataluña, En algún momento de la historia llegaron a ser 200.000 (quizás los hombres estaban escasos con tanta guerra y cruzada).

Con las represiones y quemas de éstas mujeres quisieron destruir la creatividad e iniciativa de la que habían dado pruebas las mujeres hasta ese momento. Porque la sociedad había cambiado, el derecho romano en el que no eran nada la mujer ni el niño, sustituyó poco a poco al derecho germánico y por ello ha habido, nada más y nada menos, que siete siglos de injusto silencio sobre ellas. A pesar de todo han perdurado hasta la actualidad.

En Brujas, por ejemplo, aún se pueden encontrar. El beguinario está cerca de la gran Plaza, hay un jardín con una valla, y casitas alrededor de una Iglesia. Parece ser que hoy en día quedan muy pocas y muy mayores, y que en el beguiniere de Brujas hay una orden religiosa.

jueves, 29 de marzo de 2012

La vida ideal

Soltera, sin hijos, jefa de la empresa. Casada, con 2 hijos, ama de casa. Casado, sin hijos, empresario. Casado, con hijos, nini, pero gracias a una gran herencia, no pensemos mal. ¿Quien determina como debe ser nuestra vida? Es mas, ¿quien determina la forma que debe tomar nuestra felicidad?

Me gusta pararme a ver pasar a la gente. Hacerme una idea de como son, que nivel de vida tienen, que cosas pueden gustarles, como es su vida. En toda existencia que se precie, hay momentos dulces y amargos, todos pasamos de la euforia al llanto. Forma parte del vivir humano. Pero también es cierto que, por normal general, cuando tomamos decisiones lo hacemos porque consideramos que nuestra felicidad va en ello. ¿De donde sacamos esa imagen mental, en la que aparecemos nosotros/as mismos/as en estado de alegría y que usamos para esforzarnos y luchar? 

Veo pasar a muchas parejas. Se cogen de la mano, se besan y abrazan, juegan, se dicen cosas bonitas. Son felices, al menos a simple vista lo parecen. Yo no tengo pareja. Es mas, hace ya mas de dos años que no sé que es eso de las relaciones serias. Y soy feliz. 

Hace un tiempo ya que llevo planteándome que vida quiero tener. Mi gran sueño siempre ha sido tener un fundación. Quiero dedicar mi vida a la ayuda, a la acción social. Hoy por hoy, busco formarme todo lo que puedo para ser una gran profesional. 

Soy una aficionada a los programas de decoración. Me encanta ver como la gente decora sus casas. De hecho, suelo visitar páginas de venta o alquiler de pisos y me gusta imaginar como los decoraría yo, como crearía mi hogar, mi propio espacio. 

También he hecho un descubrimiento sobre mi misma. Desde pequeña, he sido muy ahorradora. Cada vez que me proponía conseguir algo, ahorraba para ello. Y no suelo gastarme nada en caprichos si tengo una meta mayor. Ahora bien. Si tuviera dinero... Soy una chica de ocio relativamente caro. Me gusta el teatro, el cine, los museos, los actos deportivos... Y en cuestiones gastronómicas, me proclamo una adicta a la comida japonesa. Bueno, de vez en cuando volver a Europa y disfrutar de un buen italiano no estaría mal... Luego, otra vez a hacer la maleta y a trasladarse a México, con su rico picante...Y ya que hablamos de hacer maletas, ¿ por qué no probar la comida in situ? Adoro viajar. Hasta el día que mi cámara de fotos decidió que llegó la hora de su suicidio (al menos podría haber decidido otro día que no fuera el primero de mi vacaciones en Francia, para una vez que salgo del país...) me volvía loca fotografiándolo todo. Además soy la típica viajera inquieta, quiero verlo todo, no parar en todo el día. Lo de la playa y el relax está muy bien, pero lo mio es el no parar. 

¿Marido? ¿Hijos? Siempre se han quedado en un segundo plano. Y si tuviera que decir qué me apetece mas tener en un futuro, diría que hijos, aunque no sé hasta que punto seria madre soltera, tener a alguien al lado compartiendo tareas siempre es una ayuda. Pero vamos, que lo que me nace mas es ser mamá, antes que la esposa de. 

Tengo muchas cosas en mi lista de tareas pendientes. Aprender idiomas, viajar, seguir formándome. Quiero casa propia. Y quiero disfrutar de mi tiempo libre. Posiblemente, así quiero que sea mi vida. Conociendo mundo y a los que habitan en él, llegando a casa tras un largo viaje y encontrando un lugar de paz y tranquilidad. Hasta que el cuerpo aguante, quiero salir y divertirme, con 20, 30, 40 años, este cuerpo serrano ya decidirá cuando decir basta. Pero sé que si decido casarme y tener una familia, llegará un punto en el que tendré que renunciar a todo eso. No creo que a mi marido le haga demasiada gracia tener que verme siempre por fotos porque su mujer ha decidido no estar jamás en casa. ¿Hasta qué punto me apetece renunciar a los viajes por tener niños? Los bebés son adorables, incluso me he descubierto a mi misma despertando mi instinto maternal con la cría de un cerdito, pero significa renunciar a tanto tenerlos... 

Un señor llamado Durkheim escribió que las personas que contaban con gente a su alrededor, tenían menos riesgo de llegar al suicidio. Entre otras muchas comparaciones, dijo que las personas casadas se suicidaban menos que las personas solteras. Esto me ha hecho pensar bastante. Muchas veces la sociedad te marca cual es la forma de vida ideal. Te dicen que cuando eres joven, debes vivir la vida, ser independiente, comerte el mundo de un bocado. Pero conforme pasan los años, lo que toca es sentar la cabeza, casarse o tener una pareja estable, formar una familia, crear un hogar. Cuando Durkheim escribió "El suicidio", en la sociedad en la que vivía también debía imperar una determinada idea de cual es la vida perfecta. Lo que yo me planteo es si, cuando una persona decide poner fin a su vida, lo hace, no porque no sea capaz de encontrar la felicidad siendo como es, sino porque su vida no se ajusta a lo que supuestamente debería hacerle feliz. 

Me dicen que viva mis 21 años dejándome la piel, porque a los 35 toca otra cosa. ¿Y si lo que quiero es llegar exhausta a mi jubilación? O mas allá, quien sabe, conforme va aumentando la esperanza de vida, mas aguante tiene el cuerpo. Puede que la sociedad me esté marcando un camino que me lleve a la felicidad. No dudo que las personas casadas y con hijos sean felices. Pero las personas solteras, también. La felicidad es algo que debemos elegir individualmente, digan lo que digan los demás. Quien habla de matrimonio, habla de cualquier aspecto de la vida. Por ejemplo, parece que estar solo queda fatal a los ojos del mundo. Como estés sin gente a tu alrededor, eres un marginado y un antisocial. ¿Y si es lo que me apetece en ese momento? Puede llegar a ser muy interesante irse a pasear por la ciudad sin compañía, tan solo descubriendo lo que nos rodea. O simplemente, tener un momento de calma e introspección. 

Quiero ser yo y solo yo quien decida mi vida y lo que me hace feliz. Si quiero viajar, viajo, si quiero irme a ver exposiciones de arte, lo hago, si me apetece tener una maravillosa amistad con un hombre sin pasar a mayores, pues la tengo. Quiero dar cariño y amor, pero a mis amigos, a la gente que sea atendida en mi fundación, o a ese hombre con el que haga amistad. Pero nada mas. Posiblemente no me apetezca jurar amor eterno a un chico en concreto o a mis hijos, posiblemente mi cariño vaya en otra dirección. La vida puede llegar a ser increíblemente preciosa, solo hace falta conocerse a uno mismo, saber satisfacer los deseos propios, la vida es maravillosa cuando se sabe ser feliz, ser feliz incluso cuando no se es tanto, pero se saca el lado positivo a todo. Yo quiero vivir mi vida, una vida que me deje sin aliento, que me deje sin fuerzas, tan solo unas pocas para poder sonreír. Y si tiene que venir otro destino, pues adelante. Pero ese destino lo decidiré yo, sin miedo a lo que piense la gente, sin seguir lo que me marque la sociedad, tan solo siguiendo el dictado de mi alma. 

martes, 27 de marzo de 2012

D.N.I.

Han hecho recientemente un programa en el cual han aparecido dos grandes de la natación adaptada. Les estaban realizando un entrevista sobre los Juegos Olímpicos y otros aspectos de este deporte. En un momento dado, el presentador les dice que ellos son "atletas normales" como cualquier otra persona. Y uno de ellos responde que por supuesto que si, que los nadadores de natación adaptada son eso, nadadores, que parece que los deportes adaptados tengan mas componente social que deportivo, se ve mas la discapacidad que la persona.

Estoy totalmente de acuerdo con lo que se dijo. Aunque hay varias cosas sobre las cuales me gustaría reflexionar un momento. 

En primer lugar, tenemos una discapacidad. Eso es innegable. Forma parte de nosotros y hasta el día en que la medicina se revolucione del todo y encuentre remedio y nosotros decidamos tratarnos, nuestra discapacidad nos va a ir acompañando toda la vida. Pero, ¿hasta que punto hay que fijarse en esa parte de nosotros? 

A lo largo de nuestra vida vamos creando nuestra identidad, nuestra persona. La familia de la que formamos parte, nuestros amigos, nuestro mundo, incluso nuestras características biológicas nos hacen ser un tipo de persona u otra. Aparte de eso, según en el contexto donde nos encontremos, desempeñamos una serie de roles distintos. Somos como puzzles, nos componemos de partes unidas en una sola persona. 

Yo puedo tener una discapacidad. Pero no solo tengo una discapacidad. También soy morena, con ojos oscuros, bajita...Soy muchas cosas. Además, soy hija, prima, amiga, estudiante, nadadora...Pero el mundo solo es capaz de ver lo primero, que soy discapacitada. 

¿Por qué mi silla de ruedas es algo que se ve a todas horas? Yo soy discapacitada, pero por ejemplo, en el momento que me tiro al agua, soy deportista, soy nadadora. Para los ojos del mundo no, sigo siendo una persona en silla de ruedas. En el agua no hay silla, pero la gente la sigue viendo. 

No voy a negar lo que soy. De momento, tengo la gran suerte de que he aprendido a aceptarme tal como soy y sé que, aunque tenga cosas malas, tengo muchas cosas buenas que aportar al mundo. Lo que no quiero, bajo ningún concepto, es que una parte de mi me condicione para todo lo demás. 

Fijaos en un detalle. Yo me encuentro un escalón, o un ascensor averiado. En ese momento, soy claramente una persona con discapacidad, porque lo que ocurre me está impidiendo realizar una acción con normalidad. Pero cuando estudio, o trabajo, o salgo con mis amigos al cine, en esos momentos, ¿mi silla me está impidiendo hacer eso como lo haría cualquiera? En esos momentos, mi discapacidad como problema no existe, porque no me influye negativamente en lo que estoy haciendo. La gente me podría ver como estudiante, como profesional, como amiga de mis amigos, como amante de la gran pantalla. Pero no. Me ven como discapacitada. Ven algo que, en ese momento, es lo que menos me influye en mi vida. Destaco otras muchas partes de mi, pero quienes me rodean ven lo que ven, que para entrar al cine, al trabajo o a a la facultad, he utilizado dos ruedas en lugar de dos piernas. 

Además, es curioso. Para la sociedad, o tienes una característica muy buena o tienes una característica muy mala por la que destacar. Si eres discapacitado, has tenido problemas con las drogas, has sido victima de malos tratos...eso es lo que prevalece de tu persona. Ahora bien, si eres un gran futbolista, una actriz famosa, o la novia de, eso es lo que verán de ti. Messi, Brad Pitt, etc. no solo son lo que todos sabemos, también tienen una familia, también se relacionan, el rol de deportista o actor no son los únicos que desempeñan. Pero nadie piensa en Brad Pitt y lo primero que dice es "ay, si, ese hombre que tiene tanto hijos" o piensa en Messi y dice "ese pobre chico que le tiene miedo a..." Posiblemente así sea (bueno, en el primer caso lo es), lo mas probable es que ellos tengan muchas características que les definen, pero para el mundo, ellos son grandes y ricos. Por muchos defectos que tengan, son lo que son.Cometemos el error de etiquetar a las personas, pero es que además, somos clasistas etiquetando.  

Me llamó la atención aquello del "componente social del deporte adaptado". En realidad, quienes trabajamos en lo social, ¿qué perseguimos? Hasta la fecha, tengo entendido que buscamos formar una sociedad igualitaria, que viva en estado de normalización de aquellas personas con algún tipo de problema. Si solo vemos el deporte adaptado como herramienta para la terapia, ¿estamos trabajando por conseguir nuestro objetivo? 

Como ya he dicho, no se puede negar que la discapacidad esta ahí, y el deporte puede ayudar a paliar los efectos de la misma. Pero además, hay personas que dedican su vida a ese deporte. Son deportistas de élite. Si queremos conseguir nuestro objetivo social, debemos aprender a ver a ese deportista, no a ese discapacitado.Debemos verlo como uno más. 

Cuando te dedicas a lo social, creo que la gracia está en saber sacar lo positivo, las capacidades, las habilidades y virtudes de la persona. La magia de nuestro trabajo se esconde en saber sacar todo aquello que ayude a una persona a vivir dignamente, a ser independiente y autónoma en la resolución de sus problemas, a ser una mas en esta sociedad. El Trabajo Social debe ser emancipador, debe enseñar a las personas a formar parte de este todo plural que es el mundo. 

Yo veo mi discapacidad. Pero cuando me miro en el espejo, veo a una chica con ganas de vivir, con ilusiones, con sueños, con ganas de sacar adelante una carrera profesional, con ganas de divertirse y disfrutar, con ganas de querer y que la quieran... Y si tú no ves lo mismo que yo, si no eres capaz de esforzarte por verme realmente, si solo soy un par de ruedas, entonces soy invisible para ti. 

domingo, 25 de marzo de 2012

Manifiesto femenino

1.- Si no te vistes como modelo de ropa íntima, no esperes que me comporte como los galanes de telenovela.

-SI NO TE MOLESTAS EN AFEITARTE TODOS LOS DÍAS, NO ESPERES QUE ME DEPILE. 
2.- Si quieres algo, sólo pídelo. Dejemos esto en claro: Las indirectas sutiles no funcionan. Las indirectas directas no funcionan. Las indirectas muy obvias tampoco funcionan. Di las cosas tal como son.
-DECIRME QUE HAS TENIDO UN DÍA MUY DURO Y NECESITAS RELAJARTE MIENTRAS ME TOCAS UNA TETA, NO FUNCIONA. APARECER DESNUDO EN EL SALÓN CON UN CONDÓN PUESTO, MENOS AUN. INTENTA EXCITARME ANTES. 

3.- A veces no estoy pensando en ti. No pasa nada. Por favor acostúmbrate a eso. No me preguntes en qué estoy pensando, a menos que estés lista para hablar de temas como la política, la economía, el fútbol o los coches deportivos.
-A VECES NO PIENSAS. ASÚMELO. NO INTENTES CONVENCERME DE QUE TIENES ASUNTOS ‘METAFÍSICOS’ EN LA CABEZA. 

4.- Si piensas que estás gorda, muy probablemente sea cierto. No preguntes. Me negaré a responder.
-SI CREES QUE LA TIENES PEQUEÑA, SEGURO QUE ES CIERTO. PREGÚNTALO LAS VECES QUE QUIERAS. SIEMPRE MENTIRÉ MIENTRAS CONTENGO LA RISA. 

5.-Tienes suficiente ropa. Tienes demasiados zapatos. El llanto es chantaje.
-ALEGAR ‘DOLOR DE HUEVOS’ PARA CONSEGUIR QUE ME ACUESTE CONTIGO, TAMBIÉN. Y ADEMÁS, ES MENTIRA. LA DIFERENCIA ENTRE TÚ Y YO ES QUE AL FINAL YO ME SALGO CON LA MÍA Y TÚ TE QUEDAS CON LAS GANAS. 

6.- Simples SÍ y NO, son respuestas perfectamente aceptables para cualquier pregunta.
-RECUÉRDALO LA PRÓXIMA VEZ QUE TE DIGA QUE NO ME APETECE ACOSTARME CONTIGO. 

7.- Acude a mí con un problema sólo si quieres ayuda para resolverlo. Para eso sirvo. No me pidas empatía como si fuera yo una de tus amigas.
-CUANDO TE PIDO AYUDA PARA ALGÚN PROBLEMA Y NO SABES QUÉ HACER, NO ME CULPES A MÍ DE SER DEMASIADO COMPLICADA. 

8.- Una jaqueca que dura 17 meses es un problema. Que te vea un medico.
-UN COITO QUE DURA MENOS DE 3 MINUTOS, TAMBIÉN. CÓRTATELA Y ACABA DE UNA VEZ CON EL PROBLEMA. 

9.- TODOS los hombres vemos nada más 16 colores. El melón es una fruta, no un color.
-LAS MUJERES TENEMOS UN CONCEPTO MUY REALISTA DE LAS MEDIDAS. ESO NO SON 20 CM . 

10.- Si te pregunto si pasa algo malo y tu respuesta es ‘nada’, reaccionaré como si nada malo pasara.
-SI ME INVITAS AL CINE Y A CENAR, PENSARÉ QUE TIENES HAMBRE Y TE APETECE VER UNA PELÍCULA. NO ENTENDERÉ QUE ES UN ‘SOBORNO’ PARA CONSEGUIR SEXO. 

11.- ¿Qué diablos es el color fucsia? Es más, ¿Cómo coño se escribe?
-ME IMPORTA UNA MIERDA QUE TU COCHE TENGA LLANTAS DE ALEACIÓN. ES MAS, ¿PARA QUÉ COÑO SIRVE QUE SEAN DE ALEACIÓN? 

12.- No preguntes ¿Me quieres? Ten la seguridad de que si no te quisiera no estaría contigo.
-NO ME PREGUNTES SI ERES EL MEJOR. PIERDES EL TIEMPO. CUANDO APAREZCA ALGUIEN MEJOR, SERÁS EL PRIMERO EN NOTARLO. 

viernes, 23 de marzo de 2012

GRANDES PRINCESAS DE LA HISTORIA: Audrey Hepburn

Audrey Hepburn (Ixelles/Elsene, Bélgica, 4 de mayo de 1929 – Tolochenaz, Suiza, 20 de enero de 1993) fue una actriz anglo-belga, ganadora del Óscar y del premio Tony. Es conocida por ser la primera actriz que impuso la tendencia del look casual en vez del glamour (fue la pionera de las "muchachas no divas" que son toda una pauta de nuestra época). Sin embargo su innovación, su pre-figuración de la espontaneidad juvenil, la "Cara de Angel" con su frescura que lucía en pantalla y su forma de vestir, que impuso estilos y modas, la transformaron para la Historia del Cine como otro de los Mitos del Séptimo Arte. Además Audrey Hepburn es también reconocida por ser bailarina, modelo y por sus abundantes acciones humanitarias.


Durante su juventud Audrey sufrió la Segunda Guerra Mundial primero en Belgica y luego en Holanda, de donde era originaria su madre. Para evitar que sus orígenes ingleses se revelaran, la madre de Audrey la llamaba Edda Van Heemstra, como ella, y la obligó a hablar holandes: Audrey hablaba perfectamente inglés, francés, holandés e italiano, se defendía con el alemán y también chapurreaba el español...una verdadera políglota. Estudió para ser bailarina, pero la guerra hizo estragos en su constitución, así que, pese a seguir estudiando y practicando, Audrey se vio en la disyuntiva de elegir una nueva profesión, que fue la de actriz. Participó en diversas películas hasta que le llegó su gran oportunidad con el musical de Broadway Gigi (1951). A la par, participó enVacaciones en Roma (1953), su primer papel en Hollywood, por el cual ganó el Óscar por la mejor interpretación femenina.

Durante los años siguientes Audrey se convirtió en una de las actrices más reconocidas por su inigualable belleza natural, ícono de la sencillez en la elegancia femenina y transparencia de personalidad. Fue considerada entre las más queridas y populares de la meca del cine y gozó de la amistad de casi todos sus compañeros de film.
Durante estos años protagonizó Dos en la carretera, Cómo robar un millón, Una cara con ángel, My Fair Lady (1964; el famoso musical multioscarizado) y el que se considera el papel de su carrera, la Holly Golightly de Breakfast at Tiffany's (1961). Pero para Audrey su mejor papel fue, sin duda, el de la hermana Lucas en Historia de una monja. Ese papel, el conocer a su protagonista real, las similitudes (ambas eran belgas y habían sufrido la guerra) hizo que Audrey recapacitara mucho y se entregara más a sus labores humanitarias. Es, sin duda, una de las mejores películas de Audrey y del cine, pero muchas personas sólo ven a Audrey como un icono de moda por su Holly en Breakfast at Tiffany's.

Su última aparición en el cine se produjo en 1989, desde entonces y hasta su muerte en 1993, Audrey colaboró activamente con UNICEF, convirtiéndose en embajadora de buena voluntad. Audrey entró en la historia como una de las mayores estrellas de Hollywood.

jueves, 22 de marzo de 2012

Gracias a la vida

Vivir para conocer. Hasta que no te enfrentas a una realidad, no eres realmente consciente de lo que significa. En una entrada anterior, os hablé de la reacción de la gente cuando dices que no cambiarías tu situación de persona con discapacidad. 

Sinceramente, doy gracias a la vida, a Dios, al destino, a la suerte o a la Madre Naturaleza, a quien se las tenga que dar, por ser como soy. No cambiaría lo que he vivido por nada del mundo. Ni lo bueno, ni lo malo, mi vida está perfecta como está. 

Cuando conocemos las circunstancias de otras personas, que lo están pasando mal, que están sufriendo, además de compadecernos de ellas o intentar ayudarlas, tendemos a afirmar que nosotros y nosotras no podríamos vivir así, que esas vivencias nos superarían. Nos sobrecoge el solo hecho de que nos estén narrando su historia. 

Que no venga todo lo que seamos capaces de aguantar, dijo una vez una mujer en una tienda. Y tenia razón. En Trabajo Social hablamos de homeostasis, que es la tendencia a equilibrar nuestras vidas, aunque todo ande manga por hombro y patas arriba. Nuestra vida es una combinación de cambio y equilibrio. Tras la tormenta, viene la calma, tras un golpe, viene el momento de reponerse y levantarse. 

En mi vida he pasado por momentos muy duros. Pero de todos he salido, y de cada uno de ellos he podido sacar algo positivo. En general, me han servido para darme cuenta de que, aunque vivas constantemente como si jugaras a los barquitos, la vida te toca, pero no te hunde. Siempre hay motivos y razones por los que salir a flote. Las personas tenemos la capacidad de sacar fuerzas de flaqueza, tenemos una fuerza interior que nos empuja a seguir adelante. 

Me considero una persona feliz. Paso momentos tristes, como todo el mundo, pero soy feliz. Y en parte, esta felicidad, aunque suene paradójico, se lo debo a los malos momentos que he pasado. Lo que no te mata, te hace mas fuerte, y yo sigo viva. He ido ganando fuerza poco a poco, y gracias a esa fuerza, los baches me resultan mas fáciles de superar. 

Mi discapacidad podría verse como uno de esos baches, como uno de esos golpes que te da la vida. Sin embargo, no lo veo así. Posiblemente porque este golpe lo recibí estando aun en el vientre de mi madre, no lo he percibido como tal. Quizá no haya sido consciente de ello. Mi discapacidad no ha sido una desgracia. Todo lo contrario, lo veo como algo bueno que me ha ocurrido. 

Ir en silla de ruedas tiene una gran ventaja. Te permite ver las cosas desde un punto de vista que las personas sin discapacidad no alcanzan ni siquiera a entender. Es a partir de este punto en el cual ya han surgido esos pequeños problemas de la vida. 

El colegio. Una de las mejores etapas de mi vida. Después de dejar el primer colegio, privado, fui a uno público, en el cual me aseguraron que mi discapacidad no seria un problema, ya que habían mas alumnos y alumnas con discapacidad. Al principio, a mis padres les daba mucho reparo llevarme allí. Era un centro que quedaba aislado del pueblo. Alrededor se veían algunas chabolas, y habían varios caminos que conducían a barrios marginales. Para mi sorpresa y la de mis padres, fue un centro increíble. Los profesores se volcaban totalmente con los alumnos, nunca estábamos desatendidos. Si faltaba alguien, nadie se daba cuenta, porque siempre había quien le sustituyera. Incluso la directora era profesora de Educación Especial y atendía personalmente al niño con mayor discapacidad del colegio. 

Uno de los argumentos que dan los padres sobre lo que quieren que aprendan sus hijos en el colegio es que, además de aprender matemáticas o lengua, quieren que aprendan a ser personas. Desde luego yo aprendí a serlo en mi centro. Desde los 7 años compartí varias horas del día con otras personas discapacitadas, con hijos de padres drogodependientes, niños adoptados, chavales que habían sido abandonados o desatendidos por sus padres...Es mas, rara vez me juntaba con otros alumnos y alumnas que tuvieran una vida considerada normal. Todos tenían una desgracia en su vida. Pero gracias a ello estuve mamando tolerancia, respeto y solidaridad durante varios años. Quizá la inocencia de mi edad me hizo ver a la persona, al amigo, por encima de todo lo demás. Aunque lo dudo, porque en el último año me pasó algo que ya marcaba mi forma de ser ante la gente "diferente". 

En 6º de Primaria, una compañera comenzó a sentirse rechazada por el resto de chicas de clase. Le daban la espalda, le hacían vacío, jugaban con sus sentimientos y luego lo contaban como si no estuvieran haciendo nada malo. Recuerdo que, cuando se habló el tema en clase, fui la única que me puse de su lado. No era justo lo que le estaban haciendo. Llegaron a hacerle sentir una molestia para el resto del mundo. Incluso la pobre niña, cuando quiso estar un recreo conmigo, me preguntó que si me molestaba, que si era así, se marchaba. Al acabar el colegio, ella se fue a un instituto distinto al de los demás. 

El instituto. Nos desplazamos al lado contrario. El peor lugar en el que yo podría acabar. Profesores que no saben tratar una discapacidad, una psicopedagoga que, por verte con discapacidad, te considera una persona sin posibilidades, una educadora que te trata como si dependieras de ella hasta para respirar. Horrible. Pero tuvo su lado positivo también, aunque no me di cuenta de ellos hasta que salí. 

Para empezar, que una vez mas mi grupo de amistades se formaba de gente con algun problema social. Eramos dos chicas con un poco de retraso mental, una chica que vivia en una chabola, otra con problemas de diabetes que acabó siendo objeto de burla de todo el mundo y yo. 

Por lo visto, para la psicopedagoga, no existíamos como grupo. En varias ocasiones a mi se me acusó de no relacionarme con la gente. ¿Acaso mis amigas no eran "gente"? Además, fuera del centro yo hacia otras cosas, como natación, donde gané a mis mejores amigos. 

Además, esta buena señora, daba por hecho que por tener una discapacidad o ser inmigrante, ya no eras capaz de sacarte unos estudios superiores. Recuerdo un día en el que, una de mis amigas, fue para que le informara sobre formación profesional. Le encantaban los niños. Quizá no estaba preparada para hacerse cargo al 100% de esos niños, pero lo que no se podía dudar era de su capacidad para cuidarlos, darles cariño y jugar con ellos. Pues bien, la psicopedagoga le dijo que se dedicara a la estampación de camisetas. O como mucho, a algo de informática, porque no era capaz de hacer nada mas. U otro ejemplo, una mañana en la que, una compañera de República Dominicana, fue a hablar con ella porque quería hacer bachillerato. En pocas palabras, le dijo que no servia y que se lo dejara. Al final consiguió llegar a bachillerato como ella deseaba. Y a mi, por supuesto, ya me hicieron abandonar la idea de dedicarme a la medicina o al deporte, porque claro, la silla y curar a personas es algo incompatible. Por suerte, años después, he descubierto mi vocación, que nada tiene que ver con mis planteamientos iniciales. 

Fue un centro en el que nadie apostaba por el alumno. Se veía la deficiencia por encima de la capacidad. Tú no sirves, no vales, deja los estudios. Era la cancioncilla que sonaba de fondo una y otra vez. No era que te asesoraban sobre otras opciones, directamente te hacían desistir y dejar de creer en ti. 

Como ya he dicho, la educadora me trataba como alguien totalmente dependiente. Lejos de trabajar conmigo para llegar a ser mas autónoma, se convirtió en mi sombra. Su obsesión era tal, que incluso cuando le dije que si necesitaba algo en clase, como bajar la mochila de la silla, ya le pediría ayuda a algún compañero o compañera, me dijo que no, que ella estaría en clase para eso. Ya no era que no me dejara aprender a hacerlo sola, sino que insistió en ser ella mi única ayuda. No me dejó aprender ni a pedir socorro. 

Fue el centro ideal para aprender que, lejos de lo que te digan, tu siempre tienes capacidades, siempre hay algo que puedes hacer muy bien y debes intentarlo. Tendrás a personas alrededor diciéndote que no puedes, pero esa conclusión solo debes sacarla tú después de haberlo intentado. Aprendí también que, desde el punto de vista profesional, se debe ver a la persona, no al discapacitado, ni a la chabolista, ni a la inmigrante. Solo a la persona y lo que es capaz de hacer con su vida. 

Ir en silla de ruedas, acudir a ese instituto...son situaciones que siempre tienen algo bueno que sustraer. Aprender a ver el mundo y a las personas de otra manera. La injusticia te duele mas, la marginación y la exclusión las entiendes perfectamente, el sufrimiento y la impotencia son sentimientos compartidos. Hoy, soy diplomada en Trabajo Social. No solo cuento con un curriculum. También cuento con casi 22 años de vida conviviendo con las realidades que, desde mi profesión, se intentan mejorar. Cuando alguien me diga que se siente desplazado, que siente que no puede participar, cuando me hablen de impedimentos, de necesidad de lucha, sabré a la perfección de lo que me hablan. Porque, además de estudiarlo, lo he vivido en mis propias carnes. 

Gracias vida, por los malos momentos que me has regalado, porque gracias a eso soy como soy. Una persona que tiene el optimismo por bandera, con una fe inquebrantable en mi misma, con ganas de luchar y defender a los que, como yo, han tenido que lidiar con situaciones dolorosas y personas incapaces de comprenderlas. Gracias vida, por hacerme fuerte y feliz, luchadora y comprensiva, paciente y perseverante. Por regalarme el don de la empatía. Gracias por estas dos ruedas. Porque además de ruedas, son dos ojos capaces de ver lo dura pero maravillosa que eres. 

martes, 20 de marzo de 2012

Saber perder, saber ganar

Tuve una conversación muy interesante hace unos días. Un amigo y yo hablamos de nuestras metas deportivas, hasta donde queríamos intentar llegar. Hubo un momento de la conversación en que empezamos a distinguir logros y actitudes. Mi amigo me decía que quería llegar a ganar algo, aunque fuera a nivel nacional. Pero lo que no quería, bajo ningún concepto, es llegar a creérselo en exceso. Victorias, si; prepotencia, cero. 

Cuando te introduces en el mundo de las competiciones, siempre te repiten aquello de: 

"No te preocupes, lo importante es participar" 

Te van preparando siempre para la derrota, para que sepas encajarla correctamente. Te animan para que, aunque consigas un mal resultado, no dejes de intentarlo. Te repiten una y otra vez que perder es aprender, que lo que hay que hacer es tomar nota de los fallos y corregirlos. No pasa nada, te has caído, vuélvete a levantar. 

Sin embargo, apenas te enseñan a ganar. Y en mi opinión, es fundamental, tanto como enseñar a perder. Es bastante común ver que, personas que antes formaban parte de un grupo, de repente, se sienten de un nivel superior. Te miran por encima del hombro, solo se unen a los que son como ellos, incluso parece que animar para que otros lleguen donde ellos sea algo que no les corresponde hacer. 

Se olvidan de que, para llegar a la cúspide de la pirámide, primero han estado en la base. Han sido del montón. Han necesitado a gente que los empujara. Parecen olvidar el apoyo que han necesitado en los momentos de flaqueza. Incluso dejan de recordar lo que les dolía no sentirse favoritos. Al llegar a la cima, olvidan que hay otros en el camino. 

Me apena esta actitud. Es triste tener que separar al nadador, al futbolista o al motorista de la persona. Profesionalmente han triunfado, pero personalmente caen cada vez mas bajo. Son personas realmente admirables, que han llegado a lo mas alto. Quienes dedicamos tiempo a las mismas actividades que ellos, tratamos de conseguir una décima parte de sus logros. Son nuestro ejemplo. Pero cuando, de repente, te encuentras con que para ellos eres tan poca cosa, cuando ves que no se dignan a dedicarte ni una palabra de ánimo, o si lo hacen, es la costumbre o para quedar bien, dejas de querer ser como ellos. 

Cuando vez a gente así, llegas a la conclusión de que la mayor victoria posible es la humildad. Al fin y al cabo, es lo que mas les cuesta mantener. Seguir siendo persona, por muchas medallas que luzcas en tu cuello. 

Los verdaderos ganadores cada vez escasean mas. Aborrecen el podio, una y otra vez están arriba. Pero, por lo visto, estar tan arriba les hace sentir que los demás estamos demasiado abajo. Un verdadero ganador sube, luce su trofeo y baja después para celebrarlo con los demás. 

¿Sirve de algo ganar si no tienes con quien celebrarlo? ¿Vale la pena renunciar a los elogios de corazón por una medalla? ¿ Hemos olvidado la responsabilidad que significa ser un ejemplo a seguir? 

Admiro a muchos deportistas. Gente a la que conozco personalmente y gente a la que solo veo por la televisión. Pero cuando les admiro, lo hago porque busco algo mas de lo que todos vemos a simple vista. Que sean gente amable, cercana, que sepa darte consejos, animarte. Me gusta sentir que me tienen algo de afecto, que me motivan a seguir luchando por mis metas. 

Por desgracia, cada vez son menos los que muestran su lado humano. Y a veces, incluso cuando lo muestran, hay intereses de por medio. Al menos, mostrarse de esa manera tan arrogante e interesada tiene una parte positiva: enseñan como no hay que ser nunca. Lástima que la idea era mostrar todo lo contrario. 


viernes, 16 de marzo de 2012

GRANDES PRINCESAS DE LA HISTORIA : Aspasia de Mileto

Hay que citar al escritor español Federico Carlos Sainz de Robles que en su obra "Encuentro con cincuenta mujeres inolvidables", donde hace mención de Aspasia de Mileto, conocida comúnmente como la amante de Pericles, pero que fue mucho más que eso. En lo que sí coinciden los historiógrafos es en el hecho de que contó con los favores de dos diosas: Afrodita, la de la de la belleza y Atenea, la divinidad que encarnaba la inteligencia y la sabiduría, entre otros dones. 

En aquella época nadie habría pensado mal si Pericles hubiera amado a muchachos, o hubiera tratado mal a su primera mujer, pero escandalizaba que considerase a la segunda (Aspasia) un ser humano, que viviese con ella en lugar de relegarla al gineceo (en la Grecia clásica, se denominaba gineceo a la parte de la casa reservada para las mujeres), que invitara a su casa a amigos con sus mujeres. Todo esto era demasiado sorprendente y Aspasia era demasiado brillante y con demasiadas virutdes, como para ser una mujer “honrada” y ''de bien''.

Nació en la ciudad jonia de Mileto (actual Aydın, Turquía). Hija de Axíoco, fue una mujer famosa por haber estado unida al político ateniense Pericles desde aproximadamente 450-445 a. C., hasta la muerte de éste en 429. Maestra de retórica y logógrafa, tuvo gran influencia en la vida cultural y política en la Atenas del Siglo de Pericles.

Se sabe muy poco de su vida. Pasó la mayor parte de su vida adulta en Atenas, y podría haber influido tanto a Pericles como a otros políticos atenienses. Se la menciona en los escritos de Platón, Aristófanes, Jenofonte y otros autores de la época. Plutarco se refiere a ella en su biografía de Pericles.

Al parecer, en los círculos sociales de la antigua Atenas, Aspasia se hacía notar por su capacidad en retórica y por su brillante su conversación, y no tanto como mero objeto de belleza física. Según Plutarco, su casa se convirtió en un centro intelectual de Atenas, y atrajo a los más prominentes escritores y pensadores, entre los que se incluía al filósofo Sócrates. El biógrafo escribe que, a pesar de su vida inmoral, los hombres atenienses se acercaban acompañados de sus mujeres para que la oyesen conversar.

Hay diversas controversias en lo referente a la formación de Aspasia como experta en retórica. Algunos piensan que adquirió estos conocimientos en Mileto, dado que en las ciudades jonias los niños y las niñas convivían en la escuela pública y compartían el aprendizaje en situación de igualdad. También era normal entre las jónicas asistir a los círculos culturales y participar en asuntos políticos, lo que entre los atenienses era totalmente impensable, ya que el rol social de las esposas estaba restringido al ámbito doméstico. Otros, por el contrario, opinan que su formación pudo tener lugar en Atenas. Esta ciudad era en aquellos momentos un foco de atracción de sofistas y retóricos y bien pudo la milesia adquirir estos conocimientos de maestros como Antifonte de Ramnunte.

Donde quiera que adquiriese esta formación, lo que es innegable es su condición de experta en retórica; tanto como logógrafa como en lo concerniente a su faceta pedagógica. Por su extrema pericia en este arte, por su capacidad para rodearse de los más ilustres y reconocidos intelectuales de su época y por contribuir de forma activa al florecimiento de la vida cultural en Atenas, consiguió la admiración y el respeto de filósofos, artistas e ilustres demócratas. Pero también por su condición de extranjera, por su supuesta influencia sobre Pericles y por llevar una vida de mujer libre e independiente, impropia de una esposa ateniense, fue atacada, ridiculizada y vilipendiada por los conservadores y por los cómicos, entre los que cabría destacar a Aristófanes en su obra Los acarnienses y el poeta Hermipo que fue acusador en el proceso seguido contra Aspasia por impiedad y en un segundo proceso en el que también se la acusaba de proporcionar a Pericles mujeres libres en su casa. Se cuenta que Pericles suplicó derramando lágrimas ante el tribunal para pedir la absolución de la milesia.

Los escritores antiguos también recogen en sus escritos que Aspasia podría haber dirigido un burdel y la llaman hetera (una cortesana de la Antigua Grecia), si bien estos relatos han sido puestos en duda por los estudiosos modernos, basándose en que muchos de los autores eran escritores satíricos cuya principal finalidad era difamar a Pericles. Algunos investigadores cuestionan la idea de que fuese una hetera, y han sugerido que podría haber estado casada con Pericles. Aspasia tenía un hijo de Pericles, Pericles el Joven, que más tarde se convertiría en general en la academia militar ateniense y que fue ejecutado tras la batalla de Arginusas.

Se cree que Aspasia, tras la muerte de Pericles, se convirtió en amante de Lisicles, otro político ateniense.

jueves, 15 de marzo de 2012

Do you speak Spanish?

Marbella. Urbanización de lujo. Una mujer alemana muestra a las cámaras su enorme chalet. Le acompañan la periodista y el arquitecto de la vivienda. La periodista le pregunta a la mujer si sabe español. Ella dice que solo un poco. En una de las preguntas, la mujer trata de responder en nuestro idioma, con enorme dificultades. Al ver los apuros que pasa intentando responder, a la periodista solo se le ocurre decir: 

¡Ay, pero que graciosa es Christina! 

A continuación le preguntan que cuánto tiempo lleva viviendo en España. Lleva 12 años. Pero pese a todo necesita que el arquitecto le haga las veces de traductor, ya que es incapaz de seguir la entrevista en un castellano comprensible. 

Hace ya 10 meses que acabé las prácticas. Estuve en una fundación con mujeres en riesgo de exclusión social. La mayoría eran inmigrantes, así que tenían que dar clases de español para poder defenderse dentro de los talleres que se impartían.

Cuando vi el programa donde salia la mujer alemana, pensé en ellas. A las mujeres de la fundación se les dejaba claro que sin aprender español no iban a poder hacer vida normal ni integrarse en nuestra sociedad. Sin embargo, a la mujer alemana solo la calificaron de "graciosa" al no saber hablar nuestro idioma tras mas de un decenio viviendo aquí.  

¿Somos mas racistas o clasistas? Es evidente la diferencia con la que tratamos a unos o a otros dependiendo de su lugar de procedencia. En primer lugar, lo que acabo de explicar. A unas personas se les exige (algo que considero correcto, por su bien, y respetando opiniones contrarias) que aprendan el idioma del lugar, mientras que a otras les dejamos que sigan pasando sus días diciendo hola y adiós, poco mas. No veo porqué una persona del norte de África debe aprender español y un alemán no. Aprender el idioma del lugar en el que vivimos nos facilita la estancia a todos, y si hay barreras comunicativas por este motivo deberían encontrárselas todas aquellas personas que no hablan esa lengua, no aquellas personas que por proceder de determinados países no encuentran traducción. Carteles en inglés, en alemán, en francés. Nada de árabe o rumano. Para unos la vida es fácil, para otros, es difícil hasta describirla con palabras que entendamos todos. 

Cuando uno se va a vivir a otro país, le interesa entender y que le entiendan. No quiero que parezca una cuestión de supremacía del español sobre las demás lenguas.En absoluto intento decir eso. Es más, creo que dominar varias lenguas, la propia y la que aprendes en otro lugar, es lo mas idóneo, lo mas enriquecedor. Ojalá yo pueda algún día dominar varios idiomas. Pero creo que para poder realizar cualquier acto en el país donde se vive, es fundamental hacerse entender y que te entiendan. Y es bueno que te entiendan tanto si vienes de Brasil como si vienes de Irlanda.  

Recuerdo un verano, en el que fui de vacaciones a un lugar de playa. Uno de los días, quise ir a ver un pueblecito marinero, de esos en los que se ven a hombres coser redes para la pesca, donde puedes pasear viendo las embarcaciones, donde incluso se ve el trasiego de la venta de pescado en la lonja mas cercana. No encontré nada de eso. Solo bares en los que servían litros y litros de cerveza,con ofertas, una vez mas, en alemán o inglés. Toda una colonia europea. Me llama la atención especialmente porque sé que si eso mismo se hiciera con población latina o china, lo llamaríamos gueto.¿Que diferencia hay? ¿Que en el primer caso la gente tiene dinero, y en el segundo, se sobrevive como se puede? 

También, cuando te vas fuera, sobre todo al principio que no conoces a nadie, intentas encontrar a gente de tu país. Yo no he visto mucho mundo, pero tengo entendido que los estudiantes de Erasmus suelen buscar bastante a gente de su tierra, y en varios programas de televisión ya se ha visto a españoles y españolas presentando ante las cámaras a otros compatriotas. Unirse de esta manera es algo natural. Pero hay que tratar de unirse a personas de ese país al que hemos emigrado. Y lo tenemos que intentar absolutamente todos.  

Dividimos mucho a las personas en buenas o malas dependiendo de la categoría económica en las que les podamos incluir. Hace no demasiado tiempo, en un programa de televisión, se hizo la prueba de intentar que trasladaran a un hombre en coche hasta un hotel. Era un hombre de color, que en el primer caso iba vestido de piloto y en el segundo, de calle. La diferencia en la atención que recibió en ambas situaciones fue abismal. 

Cuando desarrollamos actitudes que pueden ser consideradas racistas, lo hacemos ante personas inmigrantes que tienen aspecto de ser mas pobres, con muy poco poder económico. No solemos decir que todos los chinos, rumanos, rusos o sudamericanos son iguales cuando los vemos con traje de chaqueta. ¿La capacidad de hacer daño a los demás va en función de las vestimentas? No creo que una persona, por vestir con ropa de mercadillo, vaya a tener mas intenciones de robar que un señor o señora que vive con todos los lujos. Es más, creo que mas de uno y de una se está quejando del dinero que roban los bancos y los mercados, y hasta la fecha no he visto a ningún trabajador de la Bolsa de Nueva York luciendo chándal. 

¿Por qué tratamos de distinta manera a unos inmigrantes y a otros? Todos vienen con problemas de idioma, todos intentan encontrar a gente de su país. Tienen muchas características que los hacen iguales, incluso si nos fuéramos nosotros fuera, nos comportaríamos igual. 

Tan solo quiero que pensemos una cosa. Todos son inmigrantes. La cantidad de dinero que se lleve en la cartera, la ropa con la que visten, no les exime de ser lo que son. Si al africano o al chino le estas exigiendo que aprenda español, que se relacione con españoles, que viva en barrios con gente del país, todo ello porque lo consideras un inmigrante de segunda que no tiene apenas dinero para vivir, al inmigrante al que llamamos turista, también. Porque esa es otra cuestión. Al inmigrante pobre lo llamamos así, inmigrante. Pero el que viene siendo rico se le llama turista, no lo introducimos en la misma categoría. 

A veces me paro a pensar como me sentiría si la inmigrante fuera yo. Si me dijeran que tengo que hablar un idioma mientras veo que a otro mas rico lo dejan vivir sin saber decir ni mu. Si me dijeran que me margino porque me uno a gente con quien puedo compartir mi experiencia, mientras que gente de mi país pero mas rica se une y nadie les dice nada. Y el peor sentimiento de todos, si me negaran la ayuda o me juzgaran solo por vestir con ropa normal, con lo que me puedo permitir. 

En fin, soy consciente de que hoy me he expresado muy torpemente. Tan solo quería decir que no me parece justo ni lógico que la riqueza material de la persona que viene de fuera marque el trato que se le vaya a ofrecer. No me parece justo porque no creo que el dinero defina a la persona, para mi son todos iguales, gente que se merece ser bienvenida, que tiene mucho que aportar y mucho que aprender, que merece ser conocida antes de ser juzgada. Mientras no se demuestre lo contrario, el inmigrante es, por encima de todo, un ser humano, como yo, tanto si vino en patera como en clase bussiness. 


martes, 13 de marzo de 2012

Revolución limitada

El mundo se vuelve loco y la gente responde a ello. Día tras día nos encontramos con ejemplos que nos dejan mas que claro que el mundo cada vez es menos ético, mas injusto y un lugar mas duro en el que intentar sobrevivir. Pero la gente no se queda de brazos cruzados, cada persona, según sus convicciones, actúa para tratar de frenar las devastadoras consecuencias de, en la mayoría de los casos, la actividad humana de cuatro peces gordos que tan solo pretenden enriquecerse aun mas. ¿Pero hasta que punto podemos actuar? 

Como todos y todas sabemos, debido a la gran corrupción en la esfera de la política, al mal gobierno y al bipartidismo en el que estamos cayendo, se crearon diferentes grupos de reivindicación de un sistema realmente democrático que contara con la opinión del pueblo, claramente indignado. Estos grupos han utilizado todo tipo de medios para expandirse y conseguir que otras personas se unan. 

Por ejemplo, las redes sociales. Entres cuando entres a determinadas redes sociales, siempre hay alguna viñeta, algún texto, reivindicando un sistema mas justo. Pero es curioso. Las redes sociales se crearon por personas que, hoy por hoy, nadan en el mar de la abundancia. Y rara vez utilizan su dinero para buenas causas que ayuden a la población cada vez mas desfavorecida. Además, configuran esas redes para salir ganando ellos, independientemente de que se ponga en juego, por ejemplo, nuestra privacidad. Por un lado luchamos por una causa mas que justa, pero por otro estamos alimentando algo que no lo es tanto. 

Otros medios en los cuales se expanden ideas pueden ser los de comunicación. La televisión. Nos quejamos de la programación, que cada vez es peor, que cada vez hay mas basura y menos cultura. ¿Pero quien ha dejado de ver la televisión? Creo que nadie puede responder afirmativamente a esta pregunta, por mucho que se enfade cuando ve que, ponga el canal que ponga, solo sale tertulianos sacados de la manga de ves a saber quien que solo conocen el grito como forma de expresión. 

Enlazando con esto, hablemos del móvil. Ya no como medio para comunicar ideas. Hablemos de salud. Creo que todos y todas hemos oído las típicas noticias sobre los peligros de las ondas de muchos aparatos que usamos hoy en día. Se ha dicho muchas veces que pueden causar enfermedades tales como el cáncer. Que si te lo tienes que poner aquí, porque si te lo pones allá es malo. Eso, por no no hablar de los índices de adicción al móvil u otras máquinas. Cada vez pasamos mas tiempo delante de pantallas, todas ellas mensajeras de ondas que, según se dice, perjudican a la larga la salud. ¿Quien es capaz de vivir sin móvil hoy en día? ¿Y sin televisión? ¿Sin ordenador? Es mas, ¿cuanta gente hay realmente interesada en saber como afectan estos aparatos a nuestra salud? Una pequeña minoría, sin duda.

Siguiendo con la salud. ¿Qué comemos hoy? Todo engorda, a todo le añaden productos químicos que apenas nos aporta nada nutricionalmente hablando. Por no hablar de todos esos componentes que no los conoce nadie, que se usan para mantener mejor esa comida, independientemente de nuestra salud. A las pobres hortalizas de la huerta me las llevan fritas con tanta modificación genética y con tanto producto para que no se lo coman los bichos. Que, por cierto, esa es otra cuestión. Buscamos modificar verduras para que sean mas grandes y mas hermosas, pudiendo alimentar a mas población, y luego la mitad acaba en la basura. 

Otro tema que tal. La pobre gente pobre. Creo que a nadie le parece justo que haya gente muriendo de hambre, pasándolo francamente mal, ya no en el Tercer Mundo, sino en nuestro propio país, para salir adelante y sacar adelante a la familia. ¿Realmente hacemos todo lo que podemos por ayudarles? ¿O se nos olvidan los problemas en cuanto desaparece ese señor de las noticias que nos recuerda como anda el panorama? 

Salgamos a la calle, a despejarnos de tanta inquietud. ¡La calle, que peligro! Contaminación pura y dura. Aquello de respirar aire fresco va a acabar en el olvido. Aunque la gente cada vez se preocupe mas por el medio ambiente, seguimos siendo la mayoría los que tenemos coche. Y aunque utilicemos el transporte público, éste también contamina. Y aunque no sean medios de transporte los que contaminen. Todos utilizamos en nuestro día a día objetos creados en fábricas que perjudican al medio ambiente. 

Esto es un caos. Queremos cambiar el mundo. Pero, ¿hasta que punto podemos hacerlo? Si eliminamos de Internet todo aquellos que permite lucrarse a unos pocos, si quitamos todos aquellos aparatos que nos perjudican la salud, si dejamos de comer aquello que nos puede dañar, si eliminamos aquello que consideramos basura y que nos miente descaradamente, si solo vamos allá donde el medio ambiente es respetado...¿que nos queda? Es triste plantearse esta pregunta, pero la realidad es esta. Hemos hecho que el mundo sea un lugar inhabitable, pero si lo convertimos en un lugar habitable, dejamos de saber vivir. 

De todas formas, ¿hasta donde nos importa el bienestar del ser humano, la fauna y la flora? Quizá nos importe mientras haya una vocecilla que nos recuerde que las cosas no van nada bien. Luego hay una segundo vocecilla, nuestra conciencia, que nos dura unos segundos y que nos recuerda lo que nos ha dicho la primera voz, que por cierto, solo era la radio o la televisión (esa que nos miente tanto, así que quizá el número de niños que mueren por el hambre en África no es tan alto, quien se fía hoy en día) y que nos hace sentir mal un rato. Pero solo un rato, luego, a seguir viviendo. 

¿Existe la verdadera revolución? ¿Podemos decir basta realmente? Mejor dicho ¿queremos decir basta? Si nos alzáramos contra un mundo cada vez mas tirano, mas cruel, mas horrible ¿ sabríamos vivir? 

Creo que lo peor de todo, mas allá de las enfermedades, de la contaminación, de los lavados de cerebro, es que este mundo nos ha hecho dependientes y esclavos. Nos hemos acomodados peligrosamente. Y ya no sabemos vivir de otra manera. No nos apetece vivir de diferente forma. Es mas fácil encender la tele, engullir sin mirar el plato, salir a la calle, todo ello, sin pensar, sin plantearse alternativas. Poderse se podría, claro que si, al fin y al cabo lo que hoy tenemos no estaba aquí cuando el mundo se hizo mundo, han sido creaciones del hombre. Antes se vivía con menos, y se vivía. Quizá no convenga destruirlo todo, quizá haya cosas que nos ayuden a vivir realmente bien. ¿Pero todo? Quizá la renuncia y el sacrificio, aunque duela, nos sale la vida. 

jueves, 8 de marzo de 2012

¡¡Novedades Novedosas!!

Buenos días a todos y todas!! Hace un tiempo que escribí para contaros algunas ideas que tuve sobre el blog. Ya habéis visto que ahora escribo martes y jueves, el viernes hacemos una sección dedicada a mujeres que han conseguido logros muy importantes a lo largo de toda la Historia y los domingos nos relajamos y ponemos vídeos, música, etc. 

Entonces os dije que tenia la intención de hacer que este blog sirviera para ayudar a diferentes ONGs o asociaciones sin ánimo de lucro. Empecé a buscar y solo vi que se podía monetizar esto a través de publicidad, pero no me convence. Así que he tenido otra pequeña idea. 

El blog lo visitáis bastante gente (¡nos acercamos peligrosamente a las 1000 visitas!), gente a la que yo conozco, pero no entre vosotros. Así que he pensado que estaría muy bien crear nuestro pequeño grupo en Facebook. 

¿Y que se haría en ese grupo? Para empezar, os mantendría informados e informadas sobre eventos, actividades, voluntariados, donaciones...de diferentes organizaciones. No es una entrega directa de dinero, pero aunque no lo parezca, promocionar las diferentes acciones de ONGs ayuda mucho a que puedan seguir adelante. 

También crearíamos nuestras pequeñas iniciativas. Dejaríamos constancia de pequeños gestos, por ejemplo, a favor de la mujer, sobre discapacidad, sobre multiculturalidad... Serian iniciativas muy sencillas, pero que pueden crear un gran efecto.

Tened en cuenta que, además de ser mujeres hermosas, preciosas y maravillosas, orgullosas de ser como somos, somos otras muchas cosas. Yo soy mujer, pero además discapacitada, otra puede ser mujer e inmigrante, o mujer y musulmana, o ecologista. Ser mujer forma parte de nuestra identidad, pero nuestra identidad se configura con mucho mas. Y creo que seria muy bonito compartir nuestras identidades. Nos ayuda a nosotras mismas a mostrar la belleza de lo que somos, al mismo tiempo que ayudamos a los y las demás a que se conciencien de realidades que antes, quizás, ni se habían planteado. 

¿Cuál es la condición indispensable para que se cree el grupo? Vuestra participación. Como ya sabéis, aunque escriba yo el blog, siempre he pretendido que participarais de ello. El Club de las Princesas Imperfectas es un lugar donde todas y todos tenemos voz, donde podemos mostrar al mundo lo que somos y lo que valemos. Pero todos y todas juntos/as, no solo yo. Así que para que funcione el grupo me gustaría que hubiera movimiento. El blog se va a seguir escribiendo, por supuesto. Así que si además voy a llevar adelante las iniciativas del grupo, me gustaría que fuera porque entre todos y todas lo habéis decidido así. Es una mayor dedicación por mi parte, pero si hay una buena respuesta por vuestra parte, valdrá la pena. 

Dicho esto, os dejo unos días para que me dejéis vuestras opiniones. Este viernes y posiblemente el domingo no habrá actualización. Así que tenéis mas días para leer esto y pensarlo bien. Si alguien tiene alguna duda, ya sabéis. Antes del martes os responderé. Y recordad que si os gusta el blog, podéis compartir las entradas con mas gente. Cuantos/as mas seamos, mas diversidad y mas riqueza obtendremos. Muchas gracias por vuestras visitas y vuestra atención!

martes, 6 de marzo de 2012

Democracia, política y politicos

Democracia, capitalismo, anarquismo, comunismo... Cada vez veo a mas gente mostrar claramente sus gustos y su ideología. Las nuevas tecnologías nos están permitiendo marcar nuestro territorio cada vez mas y dejarlo claro ante el mundo. 

Los españoles y españolas estamos muy descontentos/as, yo la primera. Cada vez vemos mas ejemplos de señores y señoras dedicados a la política que hacen de su capa un sayo y gobiernan como quieren, con estilo propio, si señor. Aunque eso suponga llevarle la contraria al pueblo. 

Ante este panorama, el pueblo ha despertado de su plácido sueño de una noche de verano. Nada nos parece bien, con razón, y nos quejamos. Además de reclamar nuestro derecho a la educación, a la sanidad, a los servicios sociales, a una estabilidad laboral...nos lanzamos a la calle echando mano de nuestro derecho a demostrar que estamos enfadados como monas. El derecho a la pancarta y a la consigna, que no nos lo quite nadie. 

La semana pasada se celebró una manifestación en la que participamos todos los que formamos la Universitat de Valencia. Alumnos, profesores y trabajadores. Se calcula que eramos unas 30.000 personas. Todo un éxito. Pero pese a acudir todos por los mismos motivos, las ideas que se utilizan para defender esta causa son muy distintas. Banderas de todo tipo ondeaban al viento mientras avanzaba el gentío. Todos unidos por la justicia social, pero cada uno desde su punto de vista. 

La variedad era tal, que incluso un grupo se manifestó claramente en contra de acudir al evento. Mientras los demás pedían que todos y todas acudiéramos a la manifestación, ese grupo dejó claro que aceptaba el derecho de los demás a manifestarse, pero que ellos iban a ir a clase, como un día normal. Este colectivo también tiene su concepto de justicia social, por supuesto, todos lo tenemos, pero esa era su particular manera de demostrar que lo que hoy vivimos es lo que ellos entienden por buen gobierno y por democracia. 

¿Por qué hay tanta variedad de gustos, colores y formas? ¿Como es que hay tanta gente optando por sistemas alternativos al que hoy tenemos? ¿ El sistema democrático ha perdido fans y adeptos? Cuando reflexiono sobre esto, se me viene a la mente una comparación que puede parecer un tanto absurda, pero refleja claramente lo que pienso. Esto es como cuando vas a cursar una asignatura, que tiene una pinta buenísima, crees que vas a aprender mucho, te motiva. Y de repente, te toca un mal profesor...Una asignatura mas que se va a paseo... 

Yo creo que la democracia en si no es un mal sistema. Posiblemente muchos de los sistemas que se han utilizado no sean malos en si mismos. Todos pueden aportar valores muy positivos para el progreso de la sociedad. Quienes fallan son quienes gobiernan en ese sistema. 

Estamos cayendo en el bipartidismo, hasta eso lo adoptamos de los americanos, con el Mc Donalds y el Foster no había suficiente. Mas que en democracia, vivimos en el "PPSOEcismo", elegimos A o B, el resto del abecedario desaparece. Posiblemente incluso a veces votamos a uno de los dos sin estar convencidos. Pero como son los que mas salen por la tele, los que mas proclaman a bombo y platillo su deseo de llegar a lo mas alto, pues allá que vamos. O no votamos. Vemos que todo se hace tan mal, que se cuenta tan poco con nuestra opinión, que pasamos de incluir nuestra papeleta dentro del lote. Lo cual, posiblemente sin ser esa la intención, alimenta mas aun que el partido con mas votos (PP o PSOE, por supuesto) consigan aumentar su fuerza. 

Lo confieso. Le estoy cogiendo gusto a esto de la política. He dicho a la política, no a a esos señores con traje que pasan las horas debatiendo en el Congreso de los Diputados y aburriéndose entre ellos con sus discursos. Encontrar la manera mas adecuada de llegar a la máxima libertad, a la igualdad, al reparto justo, a una vida digna para todos y todas. Eso es la verdadera política. La política se basa en servir al ciudadano y a la ciudadana. Nada tiene que ver con la avaricia, con el despilfarro, con hacer que el rico sea mas rico y el pobre sea mas pobre. Los políticos de hoy en día, al menos los que conocemos todos, han dejado de ejercer su papel debidamente, ya no merecen dedicarse a algo tan bonito como puede ser la política. 

Pero creo que el pueblo tiene la capacidad de combatir este mal. El pueblo como voz plural. Anarquistas, comunistas, ecologistas, feministas...todas las corrientes que os podáis imaginar tienen algo que aportar. Y entre todos y todas podemos cambiar las cosas. No sé vosotros y vosotras, pero hasta el idea que me lo impidan, yo voy a seguir ejerciendo mis derechos. Mi derecho a salir a la calle a reclamar lo que considere justo para la sociedad. Mi derecho a votar por un partido que no lo conozca ni Dios ni Cristo, pero yo si y encarna mis deseos y mi idea de sociedad justa y libre. Mi derecho a protestar pacíficamente por aquello que no se esté haciendo como creo conveniente, ya sea a través de mi propia voz o por escritos al organismo que sea. 

Soy una ciudadana mas de este país. Y como tal, me considero una persona con poder. Con poder para luchar por un mundo mejor. Con poder para decidir quien me representa. Con poder para elegir cuales son los valores que rigen la vida de mi pueblo. Con poder para combatir la manipulación que me pueda hacer creer que no tengo mas opciones. Y al igual que yo, cada uno de nosotros y nosotras también tenemos ese poder. Nosotros y nosotras, solo el pueblo, decide lo que ocurre. Todos tenemos voz y voto para hacer posible el cambio. Todos tenemos derecho a ser representados, sea cual sea nuestro punto de vista. Tenemos derecho a unir nuestro ideales en uno mas grande, plural pero unido, por una sociedad libre y feliz. Señoras, señores, esto es la democracia. Y no lo que esos señores de rojo y azul nos quieren vender... 

NOTA: Quienes leáis el blog, estar atentos a la actualización del jueves, tengo propuestas nuevas acerca de lo que ya comenté anteriormente de promocionar acciones solidarias a través de este maravilloso club de príncipes y princesas imperfectas. El jueves os cuento la idea!!! 

viernes, 2 de marzo de 2012

GRANDES PRINCESAS DE LA HISTORIA : Aphra Behn

Considerada por muchos como la primera escritora profesional de lengua inglesa, nació cerca de Canterbury, Inglaterra, con el apellido Johnson. Cuando todavía era una niña fue llevada a Surinam, donde conoció a un esclavo de nombre Oroonoko, que inspiraría una de sus futuras novelas. Regresó a Inglaterra entre 1658 y 1663, donde contrajo matrimonio con un comerciante holandés apellidado Behn. Su esposo murió tres años después de su matrimonio.

Introducida a los círculos políticos de la corte inglesa del rey Carlos II, fue enviada como espía a Antwerp, en la actual Bélgica, durante la guerra entre Inglaterra y los Países Bajos. Proveyó a las autoridades de su país con información política y naval, pero a cambio recibió una paga reducida. Al regresar a Inglaterra pasó un breve tiempo en prisión por sus deudas. 

Con sus conocimientos de idiomas y literatura, Aphra Behn pronto se dedicó a la escritura de poemas, novelas y obras de teatro para ganarse la vida. Escribió para el teatro "El Matrimonio Forzoso", una comedia audaz y dinámica, "Las Cortesanas Fingidas" y "El Vagabundo", una obra en dos partes donde narra las aventuras de un grupo de caballeros ingleses en Madrid y Nápoles durante el exilio de Carlos II. En su farsa "El Emperador de la Luna" utiliza como fuente el estilo de improvisación italiano conocido como la Commedia dell' Arte; la adaptación realizada por Aphra Behn fue un avance de la pantomima moderna.

Estas obras tuvieron mucho éxito, y fueron presentadas al público con el patrocinio del duque de York. En 1688 escribió la novela "Oroonoko o el Esclavo Real", en la que subvierte las ideas de su tiempo sobre los pueblos "no civilizados", y en la que muchos ven la primera novela filosófica en lengua inglesa. Además se dedicó a hacer traducciones literarias del francés y el latín al inglés.

Tal vez por sus pasadas actividades de espionaje, Aphra estuvo siempre fascinada por la relación entre el sexo y el poder, tanto en lo personal como en lo político. Llegó a ser muy conocida en su sociedad, tanto por sus obras como por ser independiente, sin estar sujeta a la autoridad de un marido. Estas ideas se consideraban inapropiadas para una mujer, y por esta razón se encontró con frecuencia con el rechazo de las autoridades literarias y políticas. El marqués de Halifax llegó incluso a afirmar que "la injustificable libertad de algunas mujeres condenaba al resto a ser reducidas". 

Tras fallecer, Aphra Behn fue sepultada en la Abadía de Westminster. Es recordada tanto por sus obras literarias como por sus esfuerzos para lograr que la voz femenina fuera escuchada en la sociedad. Con las palabras de Virginia Woolf: "Todas las mujeres deberían depositar flores en la tumba de Aphra Behn, pues fue ella quien ganó para ellas el derecho de expresar sus ideas".

jueves, 1 de marzo de 2012

Definiendo la discapacidad

Como todas sabéis, tengo una discapacidad. Soy discapacitada desde que nací y siempre he visto el mundo sobre dos ruedas. La discapacidad se puede entender de muchas formas, no siempre hay que limitarse a lo que aparece en los diccionarios o documentos oficiales. 

Por ejemplo, el diccionario de la RAE define al discapacitado como "persona que tiene impedida o entorpecida alguna de las actividades cotidianas consideradas normales, por alteración de sus funciones intelectuales o físicas". 

La definición de la OMS va por el mismo camino. Dice que la discapacidad es "toda restricción o
ausencia (debida a una deficiencia) de la capacidad de realizar una actividad en la forma o dentro del margen que se considera normal para un ser humano". 

Hoy planteo que veamos la discapacidad desde otros puntos de vista. Voy a plantearos una pregunta: ¿cada una de vosotras y de vosotros seria capaz de hacer cualquier cosa? Ya no hablo de tareas domésticas, de salir a la calle o realizar cualquier trabajo. Hablo de cualquier experiencia que se pueda llegar a vivir. Deportes de riesgo, realizar cualquier tipo de trabajo por peligroso o desagradable que sea...Cualquier cosa. 

Yo creo que la mayoría contestaría que no. Todos/as, en algún momento, somos discapacitados/as, porque todos padecemos la no capacidad de realizar algo. No todos vamos al parque de atracciones y nos atrevemos a subir en todo, no todos nos lanzamos a practicar puenting, no todos nos apuntamos a alimentarnos con insectos. 

Una silla de ruedas o una parálisis cerebral pueden ser muy visibles. Pero hay discapacidades que no lo son tanto. Una persona que padece miedo a las alturas no buscará ser limpiacristales en los mas alto del Empire State, por ejemplo. Esa persona no tiene la capacidad de hacer eso, pero no se ve a simple vista. 

Una malformación, un traumatismo, un mal parto, pueden convertirse en discapacidades. Pero el miedo, la introversión, la vergüenza, también, porque nos impiden hacer cosas que otros harían con total normalidad. 

Otra cuestión a tratar sobre el tema de la discapacidad es aquello de superarla, de intentar dejar de ser discapacitado/a a toda costa. En varias ocasiones, familiares o gente cercana te pregunta: 

¿Y tu, si pudieras, te operarias para poder andar? 

Cuando la respuesta ha sido negativa, todo el mundo se ha extrañado. Tenemos que tener en cuenta una cosa. Quien no va en silla de ruedas o quien no necesita una bastón blanco o un perro guía para moverse por el mundo, tiene un punto de vista distinto al nuestro. Para esas personas esa es la vida normal. Incluso las personas que han adquirido la discapacidad en algún momento avanzado de su vida puede haber otra vida que consideren mejor que la que viven en ese momento. Pero para las personas que llevan toda la vida conviviendo con una discapacidad, esa puede ser su vida normal, nuestra normalidad. Será una vida de lucha constante, quizás, pero todos, sin excepción, tenemos que luchar en algún momento por lo que queremos. De vivir en constante batalla no nos libramos nadie. No se puede generalizar, evidentemente, habrá personas discapacitadas que busquen no serlo. Tan solo quiero que penséis a partir de ahora que una vida sobre ruedas, a ciegas o teniendo que utilizar un tipo de comunicación distinto, también puede ser una vida feliz. 

Cuando veáis a un discapacitado, no penséis que esa es la única forma de discapacidad. Cada uno/ de vosotras y vosotros también lo estáis siendo en algún momento. Y no pasa nada. El miedo existe, el pudor también, y se puede convivir con ello. Y se puede ser muy feliz. La vida tiene muchos enfoques y puntos de vista, vivimos en un mundo totalmente plural, que se forma por la visión de cada uno en su conjunto. Cuando os hablen de normalidad o diferencia, tan solo plantearos como sois mas felices, aunque eso suponga no ser como los demás.