lunes, 27 de febrero de 2012

Princesitas malcriadas

Me ponen enferma...No sé si alguien lo habrá visto, pero hay un programa de televisión en el cual muestran como se van organizando auténticas macrofiestas para celebrar que se cumplen 16 años. La afortunadas cumpleañeras suelen ser niñas bien que quieren pasar a ser niñas mejor, si es que se puede. 

Para empezar, estas princesitas viven en auténticos castillos. Mansiones en las que necesitas un mapa para ir de una habitación a otra. Todo lujo, que no falte de nada. Se podría bailar un vals hasta en los baños. Y creo que no hace falta hablar del complejo deportivo que va incorporado: piscina, pista de tenis...Todo, todito, todo. 

Esto viene con la presentación de la niña. Quinceañeras cuyo concepto de diversión es quemar las tarjetas de crédito de tanto gastarlas. Ropa, zapatos, bolsos...Unos roperos tan grandes como toda la habitación que nos podemos permitir las demás. Recuerdo uno de los programas, en el que una de las chicas estaba de compras, y después de haberse gastado cientos de dólares en ropa, tuvo la siguiente conversación con su madre: 

- Mami, ¿me das la tarjeta de crédito? Quiero ir a Tiffany`s a divertirme... 
- ¿Cuanto te quieres divertir? 
- Mucho... 

Creo que no hace falta decir que el nivel de diversión es directamente proporcional a la cantidad de ceros del precio (los ceros, siempre a la derecha, por supuesto, lo de gastarse céntimos es cosa de pobres) o en su defecto, a la cantidad del pedrusco. 

Comienzan los preparativos de la fiesta. Y lo primero es invitar a los "amigos". Es curioso el concepto de amistad de estas chiquillas. Se van a lugares públicos y desde sitios donde se las ve bien o utilizando megáfonos, anuncian a una multitud que van a celebrar su cumpleaños. Los incontables chicos y chicas hacen cola para recoger su invitación. Es muy importante ser invitados, ya que la reina de la fiesta es una chica de lo mas popular, no ir a la fiesta supondría quedarse en un escalón muy bajo en la escala social. 

Luego vienen los ensayos. Las entradas de las niñas a la fiesta tienen que ser triunfales. Hubo una chica que me llamó especialmente la atención. Espero que no hayan demasiado ejemplares como ella. Todo un ejemplo de tiranía e insolencia. Primero, el hecho de que se haya comprado tres vestidos de ves a saber que precio y se limite a quejarse de que está gorda. Pero lo peor es la segunda parte. La niña quería hacer un baile. Para ello, eligió a otras chicas mediante un casting. Les compró unos vestidos para ser todas iguales. Solo diré que las niñas salieron llorando del ensayo por las faltas de respeto que sufrieron. Lo mas bonito que oyeron ese día es que eran gordas (por lo visto no le sobraba con verse gorda ella, lo tenían que estar las demás). 

El tema del regalo. Cochazo, por supuesto. En uno de los programas, una niña estuvo a punto de cancelar su fiesta porque su coche de superlujo no estaría para su cumpleaños. Otra tuvo una reacción que aun me indignó mas. Como broma, le pusieron un coche normal delante de la puerta. La chica, al ver el coche, un vehículo que mas de uno quisiera tener, empezó a recitar todos los insultos que habían en su repertorio. Hasta que no vio su coche de lujo, los pitidos para tapar las palabrotas no cesaron. 

¿Como educan a estas niñas? Sed insaciable de consumo. Egoísmo. Entienden por amigos que todo el instituto les conozca, tan solo quieren oír su nombre allá donde van, aunque luego ellas sean incapaces de pronunciar el nombre de nadie. Solo piensan en ellas mismas. Están tan acostumbradas a sus riquezas que son incapaces de valorar nada de lo que tienen. 

Se están educando a verdaderas tiranas, niñas que solo piensan en tener mas y mas. No les importa tener la casa vacía, mientras sea de dimensiones inmensurables. No les importa hacer daño a las demás mientras ellas muestren una buena imagen. Y ya no hablemos de pensar en quienes no tienen lo que ellas... 

Se han olvidado de que en una casa lo mas importante son las personas, que el valor de las cosas no se mide por los ceros del precio, sino lo que te hacen sentir, que tener a montones de personas alrededor no sirve de nada si no te quieren por quien eres, y que te quieran no sirve de nada si no te quieres tu. El vacío interno no se llena nunca con cosas materiales. La vida se llena de momentos que te hacen feliz, no de mansiones, coches o gente que solo quiere tu atención porque les eres útil para ser importantes. 

A veces tengo la sensación de que estas niñas hacen todo eso porque si se pararan a pensar realmente en lo que tienen en su vida, no encontrarían nada. Es una manera de evitar tener que enfrentarse a una vida vacía. Si compro, no pienso, y aunque no sea feliz, al menos no estoy triste. Vidas sin pena ni gloria. 

Lo que también me duele es que haya canales de televisión promocionando a estas niñas...¿Que hacen por la sociedad para merecer tal fama? Creo que esos padres deberían de tomarse unos momentos de reflexión para ver que están haciendo realmente con la educación de sus hijas. Aunque viendo el mundo en el que viven, parece que de tal palo, tal astilla, y así sucesivamente...


viernes, 24 de febrero de 2012

GRANDES PRINCESAS DE LA HISTORIA: Alva Myrdal

Fue una destacada feminista y socialista sueca. Se dedicó a defender los derechos de la mujer y de los desfavorecidos, así como a lucha por la paz mundial y contra la proliferación del armamento. Fue directora de la Comisión de Asuntos Sociales de la UNESCO en el año 1949, ministra para el desarme entre 1966 y 1972, y ministra sin cartera hasta el año siguiente.
Nacida en Uppsala, alcanzó notoriedad pública por primera vez en la década de 1930 como coautora de un libro titulado Crisis in the Population Question y fue una de las principales fuerzas dirigentes en la creación del Estado del Bienestar sueco, que transformó la nación de un estado de pobreza y atraso a un modelo para otras muchas naciones europeas. La premisa básica del libro es entender que las reformas sociales son necesarias para permitir la libertad individual (sobre todo de las mujeres) al tiempo que se promueve la natalidad. Simultáneamente al anuncio de muchas reformas sociales novedosas que se vieron como positivas, el libro también incorpora algo del zeitgeist de los años treinta, en su promoción de la idea de la eugenesia positiva.
Fue durante mucho tiempo un importante miembro del Partido Socialdemócrata Sueco, y a finales de los años cuarenta se involucró en temas internacionales en Naciones Unidas, llevando a su cargo su sección sobre políticas de bienestar en 1949, siendo entre 1950 y 1955 jefa de la sección de ciencia social de la Unesco - la primera mujer en alcanzar tan importantes cargos en la UN.
En el año 1970 recibió junto con su marido Kark Gunnar, el Premio Albert Einstein para la Paz. En 1982 se le concedió el Premio Nobel de la Paz. Entre sus obras podemos citar: ''Desarme; realidad y utopía'' (1965), ''El juego del desarme y guerra'', ''Armamentismo y violencia cotidiana'' (1972), y ''Dinámica del Desarme nuclear europeo'' (1981).


jueves, 23 de febrero de 2012

Que difícil es ser yo...

Que cacao mental. Lees y lees y una acaba sin saber como debe ser. Si, ser, sin mas. Bueno, con todo lo que ello implica. Formar de vestir, de comportarse, de enamorar... Después de varias lecturas, solo he podido recoger una serie de ideas que no me han servido mas que para marearme. 

Para ser mujer. Sumisa, obediente, dócil, cariñosa, dulce. ¡Pero no, tonta! Eso seria aceptar un sistema machista y patriarcal. Debes ser valiente, independiente, competitiva. ¿Competitiva? ¡Que no! Eso seria ser como un hombre, y tu sigues siendo mujer. 

A la hora de vestir. Falda, tacones, escotes, para resultar sexy. ¿Sexy para quien? ¿Para los hombres? ¿Para que puedan tratarte como si fueras un objeto sexual? ¡No! Lo importante es la comodidad, nada de tacones, ni faldas, que luego te vienen los babosos de siempre a proponerte actos indecentes. Hay que luchar contra el machismo, y el uso de zapatos de tacón y faldas muy cortas seria respaldar a ese cruel movimiento. ¡Pero mujer! Tampoco te pases todo el día en chándal. Que de vez en cuando hay que ponerse guapa, aunque sea para una misma. Además, es muy bueno para la autoestima. 

Maquillaje y aseo personal. Voy a ponerme un poco mona...¡Pero tanto no, que pareces una puerta! ¡Mírala! Mas quilos de maquillaje no le caben en la cara...¿Pero que haces, bestia? ¡Tampoco te quedes sin maquillar! Con esa cara pareces una enferma, ponle un poco de alegría a ese rostro. Si es que...no sabes maquillarte, vas promocionando un modelo de mujer totalmente machista. ¡Hay que luchar contra eso como sea! Y si es la depilación...Me depilo por aseo, no me depilo porque es una atadura para la mujer, me depilo porque hasta el hombre lo hace... 

A la hora de elegir un trabajo. Tú lo que tienes que hacer es dedicarte a cuidar a los demás...¡Quita, quita! Niña, métete en alguna ingeniería o en empresariales, demuestra que las mujeres valemos tanto como ellos y también sabemos mandar. Pero mujer, no me seas tan seca...Recuerda que detrás de tu trabajo hay personas, mas dulzura, mas amor...¡Que no, que así te mangonean como quieren! ¡Y ojito con timar al mundo, que aunque vayas a la universidad, sabemos que es un trabajo tradicional para mujeres, eso es apoyo al patriarcado de forma encubierta! 

Para seducir al hombre. Él tiene que dar el primer paso...Mujer, que antigua eres, eso era antes, ahora ellas toman la iniciativa...¡Pero no te pases! Que vas a acabar con todo el romanticismo de las historia, mira que eres...¡Sosa, mas que sosa! Siempre dejándote llevar, mas garbo, chica. ¡Animal! Tampoco te lances tanto, ¡que me lo asustas! Y acuérdate de llamarle después de la primera cita, para que se acuerde de ti...¡tampoco tanto! El chico va a creer que estás desesperada...Mira, mejor no le llames, hazte la dura, así te echará mas de menos, que te llame él...¡Cuidado! A ver si por no llamarle se cree que no lo pasasteis bien y se busca a otra... 

Lo he puesto muy exagerado, lo sé. Pero tras varios textos me he dado cuenta de una cosa. El mundo tira de nosotras una y otra vez. Cada uno barriendo para él, pero sin dejar de tirar. Al final ya no sabes si ser dulce o agresiva, sin vestirte con falda o pantalón, si maquillarte o dejar de hacerlo, me depilo, no me depilo. Entre lo que nos dicta la sociedad y lo que nos advierten las que luchan contra ello, no hay quien se aclare. Eso por no entrar también en las diferentes vertientes del feminismo. Unas dicen que todos somos iguales, mujeres y hombres. Pero de repente surge otra rama de la misma ideología que te dice que no, que somos iguales en oportunidades, pero hasta ahí. Las mujeres somos mujeres y los hombres son hombres.¿Al final, a quien seguimos? 

Creo que he encontrado la solución al conflicto. Pienso ser como a mi me dé la gana. Seré dulce con los que me quieren y sacaré las garras cuando la situación lo requiera. Me vestiré cómoda, pero sintiéndome a gusto con lo que llevo. Si quiero me maquillaré, si no, cara limpia y a la calle. Seguiré intentando crecer en mi profesión, dedicada a cuidar de los demás pero en la cual puedo llegar tan alto como cualquiera. Y ese chico será mio, o al menos lo intentaré. No voy a hacerme la dura ni la fácil, simplemente haré lo que sienta en cada momento. Que ese chico y el mundo entero juzgue por si mismo, que con ser una Princesa Imperfecta, yo ya tengo bastante. 

martes, 21 de febrero de 2012

Valencia, capital del espanto

Doloroso, muy doloroso. Imágenes e imágenes de violencia. Y esto ya no se vive fuera de nuestras fronteras, ya no es algo que solo podamos presenciar a través de los periódicos o los telediarios. Esto está ocurriendo en nuestras calles. 

Valencia, mi ciudad, se está convirtiendo en la ciudad de la barbarie. Día tras día, cuerpos de "seguridad" (¿seguridad para quien?) se emplean a fondo en dispersar a los manifestantes a golpe de porra. ¿Y quienes son esos manifestantes? Criaturas de 14 años. Si,señoras y señores, hablamos de chicos y chicas de secundaria. ¿Y por qué se manifiestan? Por defender algo que nada ni nadie les debería quitar: una educación digna, una enseñanza que les permita tener un futuro menos incierto de lo que ya es. 

Las imágenes hablan por si solas: a una niña de 14 años con una prótesis en una pierna la levantan del suelo cogiéndola del pelo, a un señor invidente se lo llevan por delante, a otro hombre de unos 60 años le pegan una paliza por intentar proteger a los chavales, acorralan a los estudiantes que lloran muertos de miedo.

Parece una respuesta al miedo que sienten los gobernantes al pueblo. ¿Miedo de qué? Ustedes siempre nadarán en la abundancia, nunca les faltará de nada, incluso cuando ya no estén en el gobierno, incluso cuando su avanzada edad les impida recordar que un día lo estuvieron. 

Nosotros sí lo tenemos, tenemos mucho miedo. Miedo a no poder formarnos,miedo a los despidos indiscriminados. Miedo al frío invierno sin mantas, a los exámenes sin folios, a tener que traer de casa incluso el papel higiénico porque nuestros institutos ya no pueden permitirse ni eso. Si, señores y señoras gobernantes, sus recortes están llegando a ese extremo. 

Les asusta que un grupo de alumnos, cuyas únicas armas son sus voces, sus pancartas y su indignación, les recuerden cuales son sus derechos como estudiantes. ¿Y nosotros? ¿A que tenemos miedo? Tenemos miedo a su desproporcionada respuesta. Responden a los gritos a palos. Les recuerdo, señores y señoras gobernantes, que solo somos alumnos. Sin armas, sin nada con lo que defendernos ante sus agresiones, tan solo nuestra voluntad de tener una educación de calidad. O educación sin mas, porque al final no podremos reclamar mas que eso. 

Yo ya no estoy decepcionada, ya no estoy indignada. Estoy triste. Triste de ver como un lugar que podría ser maravilloso para vivir y visitar se está convirtiendo en la capital del horror, del terror y del espanto. Estoy triste porque el sentimiento de frustración es cada vez mayor. Luchas y luchas y solo consigues acabar en el hospital o detenido. Podríamos vivir en constante progreso, pero vamos hacia atrás como los cangrejos.  

Las elecciones volverán. Pero no servirán para nada. Los valencianos parece que tengamos un estilo propio a la hora de elegir quien nos gobierne: quienes mas palos nos dan, mas votos ganan. No nos bastan las muestras claras de que han gastado lo que han querido y mas en cosas prácticamente inservibles. Nosotros los seguimos defendiendo con uñas y dientes. Ahora, las agresiones tampoco nos bastarán. Llegarán las elecciones y volveremos a empezar. Eso me entristece aun mas. Lucha en vano. 

Adiós a la educación, adiós a la sanidad, adiós a los servicios sociales, a la vivienda digna y al trabajo que nos da de comer. Id diciendo adiós al Estado de Bienestar, al menos, tal y como lo hemos conocido algunos afortunados y afortunadas. Dad la bienvenida a un nuevo sistema en el cual podrás formarte, curarte o vivir solo si puedes y si te lo permiten. Y si no, tu verás como sobrevives. 

Estoy triste. Pero aun queda un poquito de esperanza en mi. Aun creo que pueden cambiar las cosas, que se puede seguir luchando. No seré la persona mas indicada para ponerme a correr delante de la policía, pero estoy segura de que algo podré hacer. Y lo haré. De momento, aquí os dejo mi opinión y mis sentimientos. Quiero ofrecer todo mi apoyo a aquellos que luchan a pie de calle por el reconocimiento de nuestros derechos y nuestra dignidad como seres humanos. Y para acabar, un mensaje a nuestros gobernantes: gracias por demostrarme que no me equivoqué votando a otros. 

jueves, 16 de febrero de 2012

Con cariño y con amor

14 de Febrero, día de los Enamorados. De repente, parece que Cupido se haya vuelto majareta y se haya liado a disparos con cada pobre transeúnte que pasa por la calle. Todos son corazones, decoraciones de color rojo, flores y mas flores, abandonos de las dietas para zampar cuantos mas bombones mejor. 

El amor invade el mundo. ¿Pero solo por un día? Yo creía que el amor era fundamental todo el año. Igual pensáis que no soy nada romántica, pero lo de tener un día en el cual prestas especial atención a tu pareja, le llenas la casa con regalos que primero han llenado centros comerciales, decirse "te quiero" a todas horas...no me acaba de convencer. 

Primero, si tengo pareja es porque la quiero, ¿no? Lo de reservar un solo día del año para demostrárselo no creo que me ayude demasiado a tener una relación duradera. Se supone que tengo que demostrarle amor todo el tiempo que estemos juntos. Ademas, ¿que ese día vaya a un centro comercial y le compre lo que compra todo hijo del vecino a su pareja, va a demostrar que le quiero? 

Segundo, esto no es romanticismo, es consumismo puro y duro. Ya no se demuestra amor esforzándose por satisfacer de verdad a tu pareja, o haciéndole algo realmente especial.Los peluches, las rosas, los bombones, todo eso no tiene nada de extraordinario. ¿Donde han quedado esas cartas de amor diciendo lo que uno/a siente, las cenas románticas en casa, los paseos por lugares en los que nunca se ha paseado con alguien cogido a tu mano, los masajes a la luz de las velas? Que sea algo material, no significa que vaya a valer mas que lo no material. Siempre va a tener mucho mas valor lo que tu pareja sienta en ese momento que el precio económico que has pagado con euros en la tienda. Si hay algo que tiene que ser grande ese día, es la felicidad del otro, no el pedrusco que luzca en el dedo. 

Voy a deciros mas. Incluso el regalo puede ser material. Pero en lugar de comprarle una tarjeta con dedicatoria hecha en serie, en lugar de comprarle un pastel, en vez de comprar un álbum y colocarle fotos sin mas, hazlo con tus propias manos. Va a ser mucho mas satisfactorio para ambos saber que le has provocado una sonrisa con algo hecho por ti, que comprarle lo de siempre y dárselo sin mas. 

No hay nada mas vulgar que el dinero, es algo que todos, en mayor o menos medida, tenemos o hemos tenido en algún momento. Anteponer el euro a los sentimientos es una grandísimo error. El amor se demuestra enriqueciendo la relación, no enriqueciendo el bolsillo de nadie. 

Aunque San Valentín no es la única fecha criticable. En Navidad nos pasa lo mismo. Compramos, compramos y volvemos a comprar. Igual ese primo lejano nos cae como un tiro por la espalda o no lo vemos desde hace siglos, pero el regalo que no falte. ¿Por qué? No vamos a demostrar nada haciendo determinados regalos, y si los hacemos, que sea con una intención detrás. Funcionamos por inercia consumista, ahora toca comprar, pues compro. Igual no tiene lógica ninguna y además ni me apetece comprarle nada a esa persona, pero yo voy y compro. 

Señoras, señores, amar, ser detallista, acordarse de los demás, ser mejores amigos o familiares o mejores parejas, no es cosa de un solo día. Si lo eres o lo quieres ser, lo serás a diario. Un "te quiero" suena mejor cuando es inesperado, una caricia o un beso se sienten mas cuando se dan por querer satisfacer al otro, los detalles, cuanto mas valor sentimental y menos económico tengan, mas importantes serán. 

Si hay alguien que lea esto y tenga pareja, adelante. Llevadle a merendar por sorpresa a un lugar bonito, o preparadle su comida favorita, o si viene agotado después de estar todo el día trabajando, ofrecedle unos momentos de relax con caricias y mimos. Hacedlo hoy mismo, no esperéis un año mas tarde. El amor es algo demasiado bonito como para disfrutarlo solo durante 24 horas.

martes, 14 de febrero de 2012

La vida en el escaparate

Que curioso esto de las redes sociales...Puedes compartir de todo con gente de todo el mundo. Personas a las que ya daba por olvidadas siguen mi día a día sin hacer mayor esfuerzo que encender su ordenador e introducir una contraseña. Y además, no solo pueden ver mis fotos, en las cuales muestro los grandes eventos de mi vida. Pueden saber mis datos, si me he echado novio, si anoche ligué o mi fue a casa con la compañía de mi sombra, mis gustos, los vídeos que he estado viendo y que me han gustado...todo,todo,todo. 

También pueden comprobar nuestros niveles de autoestima. Si, de autoestima. Lo digo porque, desde hace un tiempo, he ido observando la cantidad de gente que crea álbumes completos protagonizados por ella misma. Yo, yo, otra vez yo, yo con morritos, yo con gafas de sol. Fotos y fotos de uno/a mismo/a en mas poses y posturas que si estuvieran haciendo un curso acelerado de Kamasutra. A veces me pregunto si esas personas realmente se quieren tanto a si mismas como aparentan. Porque pese a hacerse miles de fotos, quizá luego son incapaces de mirarse al espejo o de dedicarse de vez en cuando algún comentario bonito. 

Hoy en día los fotografiamos todo. Que queden para la posteridad hasta nuestros momentos de máximo aburrimiento. Dejamos constancia de nuestras tardes de domingo, tirados en casa, frente al ordenador, sin saber ya que hacer, después de haber entrado en mil páginas de Internet, hemos hablado con medio mundo, ya hemos dado de comer a nuestros perros y gatos virtuales, nos hemos montado una discoteca en casa con nuestras canciones favoritas, nos hemos sacado todas las pelusillas del ombligo. Y entonces es cuando llega el momento de sacarnos fotos. Pueden ser de cuerpo entero, como he comentado antes, o pueden ser ejercicios faciales. Y luego, todas esas fotos, van directas a las redes sociales, por supuesto. 

Si fotografiamos nuestros momentos de aburrimiento, no van a ser menos aquellos eventos de importancia. ¿Tarde de cine? Foto ¿Cenas? Foto ¿ Tarde en un parque? Foto ¿ Merienda en casa? Foto ¿ Manifestación contra los recortes en sanidad y/o educación? Fotos, fotos y mas fotos. Y esto último está llegando a niveles enfermizos. Hay personas que van a un sitio, se hacen una foto, se van y lo cuelgan en Internet como si se hubieran dejado la voz mas que nadie por la justicia social. 

¿Buscamos tener una vida feliz y plena o solo aparentarlo ante el resto del mundo? Estamos pendientes de que todas esas personas que tienen acceso a nuestra información aprueben cada frase, cada vídeo musical, cada fragmento de cada película, cada imagen para el recuerdo que compartimos. Estamos cada vez mas pendientes de la imagen que damos. La imagen es comunicación, así que cuidado con comunicar al vecino que somos unos antisociales, que podemos llegar a estar solos o sin salir mas de dos semanas seguidas. La soledad y la vida tranquila se han ganado muy mala fama. 

Luego está lo de los "amigos" de las redes sociales. No es por nada, pero si cada vez que llore o necesite un abrazo me vienen 300 a por mi, creo que mas que sentirme aliviada puedo empezar a correr como si no hubiera mañana. Hemos ampliado muchísimo el concepto de la amistad. Ya, hasta el chico ese con el que coincidimos en la panadería por las mañanas porque es un adicto a las napolitanas de chocolate, es amigo nuestro porque, no se sabe ni como, ha llegado a nuestras redes sociales y claro, nosotros/as, que somos muy amables, pues no le íbamos a ignorar. Nos cuesta horrores darle los buenos días, pero oye, ya es un amigo. 

Hablando de amigos y de compartir sentimientos, y saliendo de las redes sociales. Tengo una pregunta ¿hemos perdido ya al típico amigo que ponía su hombro cuando necesitábamos apoyo? Es que hay algunas páginas que me llaman la atención. Hay una, cuyo nombre no voy a decir pero que conoceréis la mayoría, en la cual creas carteles sobre el tema que quieras. La mayoría son geniales, comparten frases e imágenes que llegan al alma, te hacen reír o te acercan a la realidad de personas que, de otra manera, no sabrías ni que existen. Pero hay algunos que me impactan. Hablan de soledad, de rechazo, de problemas familiares. Fijaos la paradoja: se habla de sentirse mas solos/as que la una, pero estas compartiendo ese sentimiento con todo el mundo. Igual yo soy una persona muy rara, pero cuando tengo problemas, lo que menos me apetece es contárselo a todo bicho viviente, sin ton ni son, prefiero que quede entre personas de mucha confianza y yo. 

Desgracias. Hay unas páginas creadas a propósito para contarlas. Y además, ya no tienen el objetivo, como en la página anterior, de hacernos sentir algo mejor, sintiéndonos arropados por conocidos y desconocidos. El propósito es que los que lean lo que hemos escrito, además se puedan reír. ¿Donde hemos llegado? ¿Estamos tan solos y tan necesitados de atención que buscamos incluso la burla? 

Internet ha supuesto una ventana al mundo. Pero en esa ventana no solo nos asomamos cada uno/a de nosotros/as. Los cristales de nuestras ventanas son tan transparentes, que desde fuera también pueden ver lo que hacemos. Pero no solo no nos supone un problema, hemos llegado incluso a querer que nos miren, ampliando nuestras ventanas, poniéndole mas flores para que sean vistosas, dejando los cristales relucientes para que nos vean bien. 

Queremos ser y aparentar que somos. La apariencia es fundamental. Parecer que somos los que mas vida social tenemos, los que mas salimos, los que mas nos enamoramos. Los que mas hacen de todo. Los mas guapos, los mas imaginativos en las tardes mas aburridas. Los mas que hacen mas lo mas. Mas, mas,mas. ¿Nos hemos parado a pensar como nos sentimos por dentro? Que me haga mil fotos no significa que me quiera a mi misma. Que tenga a los 101 Dálmatas agregados no significa que cuando necesite compañía, la tenga. Que haga fotos hasta de mis grandes momentos en el trono, no significa que tenga una vida mas plena. 

Hemos sometido a nuestra vida a un gran escaparate. Todos el mundo ve los vestidos tan preciosos que visten nuestra vida. Pero como en cualquier tienda, las cosas nos son como parecen, en muchos casos. Los vestidos son muy bonitos, pero pueden tener un coste muy alto, nuestra aparente felicidad no es gratis. Y los carteles que nos anuncian esconden detrás mas habilidad con las nuevas tecnologías, que la realidad que pretenden anunciar. 

Dejemos de aparentar, o sigamos aparentando, pero dediquémonos a ser. Seamos felices, nosotros mismos, sin necesidad de un cartel que ponga "Me gusta" y que reafirme lo que sentimos. Dediquemos mas tiempo a vivir momentos en los cuales podamos decir que estamos felices con nuestras vidas, en lugar de crear un mundo en el cual, los demás y solo los demás, lo puedan decir porque es lo que han visto. 

Internet es un arma muy poderosa. Utilicémoslo para bien.Compartamos momentos alegres con aquellos que mas queremos y que nos quieren pero por distancia o falta de tiempo no podemos tener físicamente al lado. Y promulguemos, como ya hacemos, valores, ideales, cosas hermosas que empiezan a escasear en nuestra sociedad. Tenemos en nuestra mano cambiar muchas cosas e Internet nos lo permite. A través de lo virtual, creemos un mundo mejor muy real, empezando por nosotros/as mismos/as y expandiéndonos al resto de la humanidad. 

viernes, 10 de febrero de 2012

GRANDES PRINCESAS DE LA HISTORIA: Agustina de Aragón

Agustina Raimunda María Zaragoza (o Saragossa) Doménech, «Agustina de Aragón» (Barcelona, bautizada el 6 de marzo de 1786 – Ceuta, 29 de mayo de 1857), fue una heroica defensora de Zaragoza durante los Sitios, en la Guerra de la Independencia Española.

Se discute si Agustina nació en Reus, provincia de Tarragona, o en otros lugares, pero abunda la bibliografía aragonesa reciente que ubica su nacimiento en 1786 en la catalana ciudad de Barcelona, concretamente en el barrio de La Ribera, en la calle de Sombrerers. Hija de Francisco Ramón Zaragoza Labastida y de Raimunda Doménech Gasull, fue bautizada el 6 de marzo de 1786 en la iglesia de Santa María del Mar de Barcelona, contigua a la calle donde nació.

Agustina se casó a los 16 años con Juan Roca Vilaseca, cabo de artillería, el 17 de abril de 1803. Éste participó desde el principio en la Guerra de la Independencia Española, tomando parte en la batalla del Bruc. Los acontecimientos de la guerra los llevaron a él y a Agustina a Zaragoza.

Durante el asedio de Zaragoza, Agustina llevó a cabo la acción heroica que la hizo célebre. Tras haber caído heridos o muertos todos los defensores de la puerta llamada del Portillo, las tropas francesas se aprestaron a tomarla al asalto. La situación era desesperada y entonces Agustina, que formaba parte de un grupo de mujeres que atendía a los numerosos heridos, consiguió disparar un cañón sobre las tropas francesas que corrían sobre la entrada aparentemente indefensa. Los asaltantes franceses, temiendo una emboscada, se batieron en retirada, y nuevos defensores acudieron a tapar el boquete, defendiéndose la ciudad una vez más.

Agustina de Aragón murió en Ceuta, el 29 de mayo de 1857, a los 71 años de edad. Hasta 1870 no fueron trasladados sus restos a Zaragoza, descansando primero en el Pilar y, desde el 14 de junio de 1908, en la capilla de la Anunciación de la Iglesia de Nuestra Señora del Portillo, donde son venerados como los de una gran heroína que con valor y decisión repelió las adversidades y venció al enemigo. Se la considera como uno de los símbolos más representativos de la resistencia española contra los invasores napoleónicos. Esta guerrillera recibió los títulos y condecoraciones de Defensora de Zaragoza y de Recompensa al Valor y al Patriotismo, de orden del general Palafox, y llegó a alcanzar el rango de capitán del ejército.

Fue cantada por Lord Byron en su “Childe Harold”.

jueves, 9 de febrero de 2012

Todos somos cambio

Mi comienzo de cuatrimestre en una palabra: motivación. Incluso el profesor con peor fama me deja embobada cuando habla, me hace reflexionar muchísimo y tomo bastante nota de lo que debatimos. Y ayer dijo algo, una idea que ronda mi cabeza desde hace unos días y sobre la que me apetecía escribir aquí. 

Dijo que todo lo que se hace (hablábamos mas específicamente a nivel político) tiene un carácter social, en el sentido de que todo afecta y es para la sociedad, para los ciudadanos. Y creo que es cierto. Incluso aquellas cosas que no las valoramos como sociales, acaban teniendo un trasfondo social. 

Cualquiera consideraría a los Servicios Sociales, la Educación y la Sanidad como pilares básicos para que exista un Estado de Bienestar, para que la gente disponga, al menos de lo mínimo indispensable para vivir dignamente. Pero quiero que nos detengamos un momento y valoremos hasta que punto realizan un gran trabajo a nivel social los profesionales de estas áreas. 

Los Servicios Sociales, como su nombre indica claramente, son un sector puramente social. Los que nos dedicamos a ello hacemos todo lo posible por aportar a la gente una calidad de vida perdida por cualquier motivo imaginable. No solo somos los que tramitamos ayudas económicas y solicitudes para residencias. Antes de eso, hemos escuchado a la persona, hemos hecho el esfuerzo de ponernos en su lugar, hemos tratado de comprenderles. Sin llegar a ser psicólogos, los trabajadores y trabajadoras sociales tratamos de aliviar el malestar emocional que sienten las personas por su situación, les animamos a hacer un esfuerzo mas por cambiar su vida. Vivimos actualmente una batalla por demostrar que, por encima de la gestión y los papeles, para los trabajadores sociales, están las personas. Nuestro trabajo gira en torno al cambio social. 

Pero no somos los únicos dedicados al cambio social. Los maestros y profesores. Quien vive con pasión la tarea de la enseñanza, sabe que no consiste en entrar, dar la clase y salir, como si nada. Un/a maestro/a o profesor/a, entra al aula, dando los buenos dias, tratando de que sus alumnos responda de la misma manera. Marca unas normas de silencio y respeto durante las explicaciones. Mas tarde, fomenta la participación dejando que sus niños y niñas pregunten o respondan a los planteamientos de la clase. Los docentes trabajan el esfuerzo de sus alumnos y alumnas, mandando tarea para casa cada día. Y muestran comprensión cuando alguno no ha podido hacerlo, o paciencia, cuando algún niño o niña se resiste a trabajar, no sin enseñarles que todo acto tiene una consecuencia, y hay que responsabilizarse de lo que uno hace. Un docente no solo se dedica a enseñar algo tan básico como es leer, escribir o matemáticas básicas. Enseñan a ser personas, a ser humanos, con cada una de las normas que imponen en su aula. En colaboración con las familias, los/as maestro/as y los/as profesores/as hacen que los ciudadanos del día de mañana sean un poco mejores. 

Los médicos. No solo hacen un trabajo magnifico curando a todo paciente que entra en su consulta. Los médicos tienen en su mano hacer algo mas. Se trabaja mucho desde la cura, y bastante menos desde la prevención. Un médico no solo tiene en su mano remediar enfermedades. También tiene la capacidad de evitar que las personas padezcan cualquiera de esas enfermedades. Tiene el poder de fomentar hábitos saludables, mejores formas de alimentarse, mas ganas por practicar algún deporte, puede ofrecer mil un motivos por los cuales la mejor idea es dejar los vicios innecesarios. Si no recuerdo mal, y si me equivoco,mil disculpas, en la medicina tradicional china, el médico que mas dinero gana no es aquel que mas enfermos cura, sino aquellos que tienen a mas pacientes en perfectas condiciones de salud. 

¿Pero solo los trabajadores sociales, los médicos y los maestros fomentan el cambio social? Ni mucho menos. Todos, sin darnos cuenta, fomentamos el cambio social. Cuando un administrativo realiza cualquier trámite, está facilitando que una persona consiga algo. Cuando un arquitecto diseña una casa, está diseñando un techo bajo el cual vivirán personas. Cuando un vendedor ofrece sus productos, facilita a sus clientes objetos o alimentos que pueda necesitar. Cuando un taxista o un conductor de autobuses se desplaza, ayuda a que todas las personas que están detrás sentadas lleguen a su destino. Cuando un barrendero limpia las calles, hace que ese lugar sea un poco mas habitable. 

En un mundo en constante competición, todos vivimos en cooperación. Todos hacemos algo que afecta a otros, y que puede ayudar a que esa otra persona haga mejor o consiga antes lo que quiere. Maldecimos nuestra rutina, pensando que no hacemos mas que conducir de aquí para allá, para plantarnos antes un ordenador y montones de papeles, para dar una clase que puede que aburra mas que sirva a mas de un alumno ( y mas si este alumno se acerca peligrosamente a la adolescencia), para ver planos y planos de edificios. Un día, y otro y otro. Dejemos de ver ordenadores, dejemos de ver papeles y planos, dejemos de ver aquellos que nos aborrece. Veamos personas. 

Propongo una cosa. Cambiemos el mundo. ¿ Típica utopía,no? El cambio es mucho mas sencillo de lo que parece. Cada cosa que hagamos, sea lo que sea, vamos a hacerla con mas ilusión, pasión y entusiasmo que nunca, y pensando que detrás de esa acción,hay un ser humano en el que vamos a provocar una reacción determinada. No importa si somos trabajadores en una oficina, en una empresa, en una pequeña tienda, en grandes almacenes,artistas sobre el escenario o sobre el lienzo, si nos dedicamos al transporte público o a mantener nuestro hogar en pie, que bastante trabajo implica ya. Hagámoslo con alegría.  

Es mas. No limitemos esto a nuestro trabajo. Ampliemos esto a todo lo que hacemos. Si podemos ir con la calle sonriendo,vamos a hacerlo. Si podemos dar los buenos días a todo el que pasa, vamos a hacerlo. Si podemos tener detalles con quienes nos rodean,vamos a hacerlo. Si podemos ser ejemplo, ayudando a alguien, cuidando a nuestra mascota, cuidando el medio ambiente, siendo la muestra mas clara de que aun hay motivos para ser feliz, vamos a hacerlo. Hagamos que nuestro día a día se convierta en ese motor que cambie las cosas. Hagámoslo. 

Recordemos que este mundo, en el que cada día hay mas distancia, en el que cada vez disponemos de menos tiempo para acordarnos de los demás, en el que vemos cada vez mas injusticias que parecen imparables, recordemos que hay seres humanos, que somos todos nosotros, seres humanos con poder y capacidad para darle la vuelta a la tortilla. Solo se necesita tener los ojos bien abiertos, muchas ganas y voluntad y coger la sartén por el mango. No es tan difícil, todo es posible. 

martes, 7 de febrero de 2012

El otro lado de los barrotes

En uno de mis aterrizajes forzosos al mundo real, después de haber estado bastante tiempo con la cabeza entre los apuntes, vi como unos conocidos míos abrían un debate sobre la cadena perpetua. Por lo visto, Rajoy se ha pronunciado sobre el tema. 

A raíz de esto, se me ha ocurrido contaros una anécdota . No pretendo ni crear polémica ni haceros cambiar vuestra forma de pensar sobre esta cuestión. Pero quiero que conozcáis mi propia experiencia, una experiencia que, como mínimo, me hizo ver las cosas de otra manera. 

Cuando comencé la carrera de Trabajo Social, realicé un curso de voluntariado en drogodependencias, ya que era una problemática que me atraía mucho. El último día, voluntarios/as de varias ONGs y asociaciones venían a ofrecer su centro como lugar para hacernos voluntarios/as. Vino un hombre de una organización que yo ya conocía con anterioridad, por haber asistido a un acto benéfico de la misma, y como podía tener contacto con otros voluntarios conocidos, pues decidí entrar allí. 

Se trataba de una organización sin ánimo de lucro, cuyo fin era la inserción sociolaboral de personas que estaban o habían estado en la cárcel. Dicho así, podría dar la sensación de que esas personas podían dar bastante miedo, o como mínimo desconfianza. Pero no. La inmensa mayoría, para empezar, padecían tanto sida como cáncer al mismo tiempo. Su aspecto era notoriamente descuidado, cansado, castigado, por los golpes de la enfermedad y de la vida misma que habían tenido. Muchos tenían un gran historial de consumo de drogas, algo difícil de frenar allí, ya que era una residencia que les permitía entrar y salir cuando tuvieran ratos libres, con lo cual, cada vez que cruzaban la puerta, podían consumir. Se castigaba el consumo dentro de la casa,pero no fuera de ella.Sus modales no eran demasiado buenos, pero hay que tener en cuenta que en la cárcel, el "por favor" y el "gracias" no siempre son eficaces. Como ya he dicho, vivían allí, ya que muchos de ellos ya no tenían donde ir, sus familias habían decidido desentenderse de ellos. Se alojaban allí cuando salían definitivamente de prisión, cuando contaban con algún permiso, o, en el peor de los casos, aunque de los mas comunes, cuando entraban en fase terminal por sus enfermedades y se les concedía el derecho a morir en un lugar mas digno que una celda. 

Todos habían entrado en la cárcel por algún motivo. Pero nadie preguntaba nada. Alguna vez se escuchaba algún comentario sobre los años que habían estado dentro, o alguna vez hablaban sobre algo que habían hecho, pero rara vez la información era completa. Completabas la historia según tu imaginación o conocimientos te lo permitían. Para quienes dedicábamos tiempo a esas personas, eran precisamente eso,personas, seres humanos que en ese momento necesitaban alguna ayuda, sin ir mas allá en los malos actos que hubieran podido cometer. 

Me acuerdo de algunos de ellos, pero en especial me acuerdo de una mujer. La llamaré E. Cuando la conocí, E se encontraba sentada en un sillón, junto a otra voluntaria. Estaba fumando. Fumaba con mucha ansiedad, como si en lugar de ponerse el cigarro en los labios, lo pusiera sobre un aspirador que absorbe todo el tabaco de una sola calada. Se le veía nerviosa, malhumorada. Entre la otra voluntaria y yo intentamos que quisiera hacer algo, jugar a algún juego de mesa o charlar, pero a los pocos minutos se cansó, se levantó y se fue murmurando algo entre dientes. 

Me llamó mucho la atención su vientre. E estaba delgada, pero su tripa estaba muy hinchada. Parecía que estaba embarazada. Pensé en los problemas que padecería el bebé como su madre siguiera fumando de aquella manera. Como si no tuvieran ya bastantes problemas por la situación de aquella mujer. 

Al poco rato, me crucé con otra voluntaria. Me preguntó si ya había conocido a E. Afirmé, y empezó a contarme un poco su historia. E había entrado en la cárcel por pequeños delitos. No habían sido graves, pero eran suficientes para poder entrar en la cárcel. E tenia un problema muy grave con las drogas, era politoxicómana y además, a un nivel totalmente fuera de control. Había entrado en varias ocasiones en centros donde la trataban, pero, o había abandonado, o directamente se había escapado. El único lugar donde lograba controlarse era en prisión, así que lo que hacia era cometer delitos menores para que la encerraran, al menos un tiempo. 

Como habréis podido imaginaros, ese vientre tan abultado no era ningún embarazo. Tiene el vientre tan inflamado por sus hábitos de consumo de drogas. Había consumido tanto a lo largo de su vida, que su hígado había dicho basta y se había inflamado hasta ese punto. 

Se encontraba en la residencia de forma temporal. Su destino la llevaba, una vez mas, a un centro de desintoxicación y deshabituación. El éxito estaba muy en duda, pero había que intentarlo. Iba a ser difícil, muy complicado, ya que, para empezar, al estar en una residencia con una puerta abierta a la calle, en los pocos días que había estado allí, ya había vuelto a consumir, de ahí su ansiedad. Incluso al tomarse la merienda temblaba, derramó algo de leche y le costó quitarle el papel a las magdalenas. 

E era madre. Tenia dos hijos. De hecho, eran el único motivo por el cual aquella pobre mujer aun podia sonreír. En aquellos momentos en los que se encontraba bien y era consciente de su realidad, había manifestado encontrarse feliz por saber que sus hijos estaban con una buena familia que les podía sacar adelante, algo que ella nunca iba a poder hacer. 

Por la noche, volví a casa, y no volví a saber nada de E. Si había llegado bien al centro, si había logrado mejorar algo, si había vuelto a cometer algún delito. No supe nada mas. Pero el poco tiempo que estuve con ella me hizo pensar mucho. 

Cuando vemos la televisión, las personas que salen, que son juzgadas y condenadas, suelen ser personas que han cometido delitos muy graves, personas a las que consideramos el gran mal de nuestra sociedad, no dudamos ni un segundo en juzgarles nosotros mismos y en desearles una vida llena de dolor y desgracias por haber causado tantos daños.

Pero no siempre quien entra en la cárcel es así. Como E, hay muchas personas que entran porque no ser libres es la única forma que tienen de seguir vivos. Hay personas con mucha historia detrás. Sin quitarles la responsabilidad que tenemos todos sobre nuestros propios actos, ya que siempre se puede actuar de otra manera, estas personas han vivido unas determinadas circunstancias que les han podido empujar a hacer determinadas acciones. 

Y os aseguro una cosa. No se ve con los mismos ojos a la persona que entra en la cárcel por el motivo que sea, que a la persona que sale, prácticamente moribunda, que no va nadie a decirle adiós por última vez, y cuya suerte no va mas allá de conseguir una cama en una residencia en la cual poder morir dignamente. 
No justifico, porque es injustificable totalmente, a aquellas personas que han cometido homicidio o asesinato, o que han violado, o han cometido cualquier delito de gravedad considerable. Hablo sobre todo de aquellas personas que cumplen condena por delitos menos graves, pero que su condena les lleva a un fin de enfermedad, marginación y exclusión. 

Si hay algo que me llevo de aquel sitio es el que me haya hecho ver las cosas desde otro punto de vista. Si tienes corazón, por muy realista que seas, por muy a favor que estés de que, si alguien mata o viola, debe pagarlo de por vida perdiendo su libertad, por muy racional que seas y no te dejes llevar fácilmente por tus emociones, sitios así te hacen pensar. Dejar de ver al ladrón para ver al enfermo, afecta a cualquiera. 

No quiero que nadie cambie de opinión. No pretendo que, de repente, os posicionéis todos/as en contra del endurecimiento de las penas. Pero si que quiero que, cuando paséis junto a una cárcel, penséis que allí dentro no solo viven asesinos, violadores y otros muchos grandes delincuentes. También viven personas como E, para las cuales, esas rejas, no son una barrera que les impide disfrutar de la libertad, sino un escudo que les protege de la muerte en vida. 

viernes, 3 de febrero de 2012

GRANDES PRINCESAS DE LA HISTORIA : Cleopatra VII.

Última reina de Egipto, perteneciente a la dinastía de los Lágidas o Ptolomeos (Alejandría, 69 - 30 a. C.). Nació en el año 69 a.C. y murió en el año 30 a.C. Hija de Ptolomeo XII, fue casada con su propio hermano Ptolomeo XIII, con quien heredó el Trono en el año 51 a. C.
El padre de Cleopatra era un hombre más conocido por su corrupción que por su buena gestión en los asuntos de Estado. El Imperio de Roma encontró en Ptolomeo XII un acceso fácil al oro de Egipto. Debido a unos levantamientos populares, Ptolomeo hubo de acudir a Roma, dejando el trono a su esposa, Cleopatra V y a su hija Berenice IV. Un año después, la esposa de Ptolomeo murió y Berenice se quedó sola en el trono. 

Ptolomeo volvió. Consiguió sofocar los altercados, en los cuales estaba involucrado el segundo marido de su hija Berenice, a la que mandó ejecutar en el año 55 a.C. A la muerte de Ptolomeo XII, Cleopatra y su hermano comenzaron a gobernar.

Pronto estallaron los conflictos entre los dos hermanos y esposos, que llevaron al destronamiento de Cleopatra. Los conflictos se debieron a la gran influencia que tuvieron el eunuco Potino, el general Aquilas y el retórico Teodoto sobre Ptolomeo XIII, hombres de poca confianza para Cleopatra. Fue desterrada a Siria, desde donde intentó crear un ejército para recuperar su trono, pero no lo consiguió.

Sin embargo, su suerte cambió al llegar hasta Egipto las luchas civiles de Roma: persiguiendo a su enemigo Pompeyo, Julio César fue a Egipto y tomó partido por Cleopatra en el conflicto con su hermano, ya que Ptolomeo XIII cometió el gran error de asesinar a Pompeyo, creyendo que a Julio César le agradaría, pero las intenciones del gran gobernante de Roma eran totalmente contrarias. Su intención era capturarle con vida, e incluso perdonarle. Además, Cleopatra ya había conseguido seducirle.

Durante la llamada «Guerra Alejandrina» (48-47 a. C.) murieron tanto Pompeyo como Ptolomeo XIII y tuvo lugar el incendio de la legendaria Biblioteca de Alejandría, que se perdió para siempre. El incendio fue provocado al incendiar 72 navíos de guerra egipcios y 50 trirremes romanos, por orden del mismo César, para que no cayeran en manos de los hombres de Aquilas.  

Cleopatra fue repuesta en el Trono por César, que se había convertido en su amante (46 a. C.); y contrajo matrimonio de nuevo con su otro hermano, Ptolomeo XIV, a quien manejó a su antojo. Cleopatra trató de utilizar su influencia sobre César para restablecer la hegemonía de Egipto en el Mediterráneo oriental como aliada de Roma; y el nacimiento de un hijo de ambos -Ptolomeo XV o Cesarión- parecía reforzar esa posibilidad.

Tras el asesinato de César en el 44 a. C., Cleopatra se quedó al mando, junto con su nuevo esposo y también hermano, al que envenenó, sustituyéndolo por su hijo, de tan solo 4 años, nombrado corregente.  

Cleopatra intentó repetir la maniobra seduciendo a su inmediato sucesor, el cónsul Marco Antonio, que por aquel entonces luchaba con Octavio por el poder (36 a. C.). Cleopatra y Antonio impusieron su fuerza en Oriente creando un nuevo reino helenístico capaz de conquistar Armenia en el 34.Marco Antonio tuvo que casarse con Octavia anteriormente, pero también se casó tras la conquista del territorio armenio con Cleopatra, sin repudiar a su primera esposa.

Marco Antonio y Octavio, legitimo heredero de Roma, volvieron a empeorar sus relaciones, enemistad que llevó a Octavio a ganar la batalla naval de Actio, gracias a las habilidades del general Agripa, y al suicidio de Marco Antonio por creer que Cleopatra había muerto, tal como leyó en un falso informe.

Cleopatra, conocedora de su destino, posiblemente siendo esclava de Octavio, decidió quitarse la vida. Hay versiones que dicen que mandó a dos de sus criadas traerle una cesta de fruta con un áspid dentro. Otras versiones dicen que se quitó la vida al conocer la muerte de su esposo. El lugar de su sepultura es todo un misterio. 

jueves, 2 de febrero de 2012

Superación

Ya han pasado dos días desde que terminé los exámenes. Que felicidad...Y mas feliz me hace aun saber mis notas, y comprobar que una vez mas he subido mi media. 

Sacar buenas notas siempre ha sido para mi un aliciente. Me siento muy bien al saber que poco a poco voy mejorando, que el esfuerzo vale tanto la pena. Desde que tengo memoria, siempre me he sentido bien cuando he visto que mis notas eran buenas y cada vez mejores. Ha sido una manera de sentir que cada día conseguía superarme a mi misma. 

Y eso que siempre he tenido a gente alrededor diciéndome: 

"Mujer, no hace falta que te esfuerces tanto, si vas a aprobar. Además, si a la universidad, por ser discapacitada, vas a entrar con un 5" 

En primer lugar, nunca me ha gustado utilizar mi silla de ruedas como excusa o como ventaja ante nadie. Si se me aplica alguna ayuda para eliminar una situación de desigualdad hacia el resto de mis compañeros, de acuerdo. Pero el hecho de ser ayudada cuando no lo requería, posicionándome así por delante de otros, con los cuales no tengo ninguna diferencia, ya no me ha parecido tan justo. A nivel académico, tengo la misma capacidad que el resto de los alumnos, puedo y debo hacer el mismo esfuerzo para sacar adelante mis estudios y sacar iguales resultados que ellos. 

En segundo lugar, y en relación con lo que acabo de seguir, posiblemente mi opinión se base en lo siguiente. Recuerdo, durante prácticamente toda primaria y secundaria, encontrarme con compañeros que tenían problemas reales para seguir el ritmo de clase. No tenían ningún tipo de discapacidad, sin embargo, requerían de apoyos para poder avanzar. Al no ser personas discapacitadas, determinadas ayudas no les llegaban,teniendo que conformarse, las más de las veces, con su único esfuerzo y sus ganas por seguir adelante. Siempre me he preguntado, ¿por qué yo, que puedo sacar lo mismo que cualquier esforzándome, recibo ayudas, y quienes no pueden,por no tener una discapacidad,no son ayudados? Una silla de ruedas, que se puede relacionar con una situación de desigualdad, no lo estaba siendo. Sin embargo, las dificultades invisibles de mis compañeros y compañeras pasan desapercibidas y jamás tuvieron excesiva repercusión en cuanto a ayudas o refuerzos para que pudieran lograr sus metas. 

Creo que hacer lo que hago sin tratar de hacerlo mejor cada vez no tendría sentido. Ya no solo los estudios, todo lo demás también. Cierto es, que mis resultados académicos siempre han sido importantes para mi, bien por la influencia de mis padres, bien por el gusto y el placer que me da estudiar algo que me apasiona, como es el Trabajo Social. Pero, por ejemplo, el deporte, también me motiva y me ayuda a superarme día a día. Aunque tenga otras muchas ventajas, como los valores que transmite, los amigos que ganas o los lugares que conoces gracias a los viajes de competición en competición, poder lanzarme a la piscina y ver, poco a poco, que voy logrando mejores resultados, que el cronómetro cada vez marca menos tiempo y que mi técnica y mi sensación en el agua es mejor año tras año, me empuja a seguir nadando. 

Quizá, donde mas me ha costado darme cuenta de lo motivador que resulta la superación de uno/a mismo/a, es el la cuestión de la autonomía y la independencia. Reconozco que por simple pereza, hay cuestiones de mi día a día que he dejado muy de lado hasta que me ha afectado lo suficiente como para dolerme. No poder salir hasta determinada hora porque tenia que sondarme, o no poderme quedar sola en casa, eran cosas que, hasta que no las viví con una determinada edad, no eran importantes para mi. No me dolió hasta que quise hacerlo y no pude. Me tocó aprender a la fuerza. Pero ha valido la pena, ahora que lo he conseguido. Y me siento cada vez mejor sabiendo que cada día dependo menos de otros y mas de mi misma. 

Y bueno, como no, también está el intento de ser cada día mejor persona. Mas generosa, mas paciente, mas empática. La superación está en muchos aspectos de nuestras vidas, por no decir en cada cosa que hagamos a diario. 

Me llama la atención aquellas personas, algunas de no tan avanzada edad, que dicen aquello tan típico de: 

"Con mi edad, siendo toda la vida así, ya no vale la pena que cambie. Soy demasiado mayor y llevo demasiado tiempo haciendo las cosas de esta manera" 

¿Superarse a si mismo/a es una cuestión de edad? ¿ Tenemos un límite que nos impide ser mejores cada día? ¿ O es tan solo una excusa para refugiarnos en la comodidad y dejar de buscarnos complicaciones? Considero que toda aquella persona que desee ser un poco mejor el día de mañana, está a tiempo de hacerlo. Además, aunque al principio cueste, a la larga siempre se logran resultados visibles, ya no solo para uno/a mismo/a, la gente que nos rodea lo notará también. 

Claro está que nunca llegaremos a la perfección, meta imposible de alcanzar por ser inexistente, pero siempre podemos sentirnos mas realizados y completos al hacer todo aquello que nunca habíamos hecho, y hacerles mas agradable la vida a los demás. Todo es cuestión de ponerse manos a la obra.